Neptuno Films ha anunciado el cierre de varios acuerdos de distribución para la serie de animación en 3D 'Rupert and Sam', coproducida por TV3 (Televisió de Catalunya), IB3 y 3D Videographics. La serie consta de 26 episodios de 3 minutos.
La serie ha sido adquirida para su emisión o venta en Turquía, India, Indonesia, Sri Lanka, Ucrania, Serbia, Croacia, Bosnia Herzegovina, Macedonia, Montenegro, Kosovo, Slovenia y países de Medio Oriente. En total, la serie animada podrá verse en 20 países fuera de nuestras fronteras. La número además podría verse ampliado ya que la compañía sigue negociando la distribución de 'Rupert and Sam' en otros países."Es fantástico que hayamos cerrado estos acuerdos", ha afirmado Cristina Brandner, directora general de Neptuno Films. "Tenemos mucha fe en esta serie y creemos que los broadcasters estarán muy entusiasmados de tener a estos adorables personajes en sus parrillas. Estoy segura de que anunciaremos más acuerdos próximamente".
La serie animada cuenta las aventuras de Rupert y Sam, dos amigos optimistas que están tan perdidos que no saben ni siquiera en qué océano han caído con su avioneta. Sam es un pollo que padece hidrofobia y que intenta huir constantemente. Rupert es otro pájaro, pero más conformista, sólo quiere ser feliz en su islote. Los dos personajes estarán acompañados por una tortuga filósofa y una gaviota pirata.
Cada minuto de esta serie cuesta 7.000 euros, aseguró hace algún tiempo Joan Salvador, fundador de 3D Videographics, en declaraciones al diario El Mundo. "Manteniendo los nombres, mantenemos la personalidad y creamos una imagen de marca". Tal y como aseguraba Salvador, 'Rupert and Sam' es un producto destinado a todos los públicos, al que hable en catalán, en castellano, en inglés...
Así es 'Rupert y Sam'
La avioneta de Sam y Rupert se ha estampado en una isla perdida en medio del océano... ¿En el Índico? ¿En el Atlántico? ¿En el Pacífico? No se sabe. Una palmera de cocos, cuatro piedras, arena y mucha, pero que mucha, agua, es todo lo que hay alrededor.
Sam y Rupert pronto de darán cuenta que están muy lejos de cualquier civilización conocida. Optimistas de por sí, no perderán la esperanza de que los encuentren. Y eso que no les funciona el radio, la avioneta no se puede arreglar y hace muchos días que no ven nada en el horizonte.
Por si fuera poco, la isla no está desierta. Viven unos habitantes muy especiales, dispuestos a hacerles la supervivencia más fácil... o no...
