'AHS: Roanoke': el séptimo episodio se convierte en uno de los más terroríficos de su historia

El séptimo episodio de 'AHS: Roanoke' ha convertido a sus protagonistas en auténticas estrellas de Youtube. No hay ninguno que se salve de la tentación de, cámara en mano, ir grabando el infierno en el que se ha convertido esa mansión donde la temida sombra de la muerte nunca deja de estar al acecho.

Y es que, con permiso del anterior, este espeluznante capítulo ha llegado pisando fuerte dejando varios cadáveres por el camino y algunas escenas tan terroríficas que hacen competencia a la siempre aclamada 'Asylum'. Aunque no es el primero en morir, el personaje que encarna un Cheyenne Jackson sin escrúpulos es una de las víctimas del episodio. En el caso de Andre Holland, el actor que interpreta al auténtico Matt, la situación se pone aún más cruda si cabe, porque la autora de su muerte no es otra que una Shelby muerta de celos por el affair que mantiene su marido con el misterioso personaje de Gaga.

El tercer Emmy de Kathy Bates, cada vez más cerca

En apenas siete episodios, Kathy Bates ha pasado de ser la temible Carnicera para convertirse en una esquizofrénica estrella de Hollywood venida a menos para la que la ausencia de un foco apuntando a su persona puede llegar a convertirse en su verdadera pesadilla. Y así es. Después de ser apartada del proyecto que retomaría los misterios acontecidos en Roanoke, el personaje de Agnes se ve inmerso en un peligroso estado de paroxismo que hace que la veterana actriz pase a ser digna merecedora del que ya sería su tercer Premio Emmy.

Mientras los habitantes de la mansión tiemblan aterrorizados por lo paranormal, Agnes hace acto de presencia con el fin de encarnarse en un ser mucho más sanguinario que la propia Carnicera. Hacha en mano y furia en vena, la que dio vida a la villana del exitoso documental 'My Roanoke Nightmare' regresa al lugar que le lanzó a la fama con ansias de venganza. Y no lo hace de cualquier manera, no. Caracterizada de nuevo con sus vestiduras del siglo XVI, Agnes va a por todos en una irrefrenable lucha que parece que nunca llegará a su fin. Ni el equipo de producción, ni una apuñalada Shelvy logran acabar con ella, por lo que no queda más remedio que sea la Carnicera, la de verdad, la que haga frente a su alter ego en la ficción, que se despide de su querida audiencia con un maravilloso y al mismo tiempo preocupante: "Yo solo quería salir en televisión".