Crítica de la segunda temporada de 'Westworld': La rebelión de las máquinas

La rebelión de las máquinas. Desde la María de Fritz Lang de "Metropolis" hasta llegar al Skynet de James Cameron en "Terminator", por poner dos ejemplos aleatorios. No son pocas las obras literarias, cinematográficas o televisivas que han reflexionado sobre esta idea. ¿Qué pasarías si las máquinas tomaran conciencia y se rebelasen contra sus creadores? Pesos pesados han tratado esta cuestión. "Blade Runner", "2001: Una odisea en el espacio", "Matrix" o "Ex Machina" son solo ejemplos aislados de este mismo concepto, pero... ¿Qué tiene 'Westworld' que no se haya explorado ya en decenas de obras? La respuesta corta sería una gran personalidad. La larga, con motivo del estreno de la segunda temporada en HBO España, la vamos a intentar desgranar en esta crítica sin spoilers.

Murieron con las botas puestas

El 23 de abril llega la segunda temporada de 'Westworld', dispuesta a contarnos una de las batallas más épicas, violentas y misteriosas entre androides/anfitriones y humanos que se ha visto en la pequeña pantalla. La primera temporada de la serie, basada en la película de Michael Crichton, nos presentó un futurista parque temático ambientado en el oeste americano donde los visitantes podían dar rienda suelta a todos sus deseos más ocultos y oscuros. Y como rezan varios de sus protagonistas: "Los placeres violentos poseen finales violentos". Así terminó la season finale de la primera temporada, en un baño de violencia reciproca entre los anfitriones y sus hasta ahora dueños. Las cartas están puestas sobre la mesa y ahora sí comienza la verdadera guerra entre anfitriones y humanos.

Algunas de las pistas donde podemos entrever el porvenir de la serie se encuentran su opening, una de sus señas de identidad. Como ya hiciera con 'Juego de Tronos' en sus títulos de crédito inicial, HBO se recrea en una de las intros más extensas que podemos encontrar actualmente en la televisión. En esta segunda temporada, se mantiene la sintonía pero encontramos nuevas imágenes, como es la creación de toros y una mujer robot con un bebé, dejando claro que veremos más tipos de anfitriones y que la maternidad será uno de los arcos argumentales de la temporada.

Sin perdón

Si algo se le pudo recriminar a la primera temporada es una estructura algo repetitiva y lenta que se vio afectada por la decisión de los autores: supeditarlo todo a la gran sorpresa final. Fue una decisión arriesgada que pudo hacer que perdiese a parte del público ávido de argumentos más directos, pero que desde luego fue el golpe maestro para enganchar a la legión de fans que necesitaba ese golpe de efecto. Si eres de los que disfrutó con ese camino, y no solo con el desenlace, vas a volver a hacerlo de nuevo.

La segunda temporada sigue apostando por la utilización de diferentes líneas temporales que continúan descolocando al espectador y que ya forman parte de la marca de la casa. El primero de los episodios, titulado "Journey into night", retoma la acción en el punto en que se quedó, con el inicio de la rebelión de los anfitriones contra los humanos, y recolocando todas las piezas de la nueva partida que se espera aún más épica que la anterior. Este primer episodio, nos deja con muchas más dudas que resoluciones respecto al apoteósico final del que veníamos, pero con la promesa de ir dando respuestas a medida que abren nuevos misterios. Aunque así comenzó 'Perdidos'...

Las claves de 'Westworld' siguen intactas, nos encontramos con una gran ambientación que mezcla dos mundos, el del lejano oeste y el futurista, que tiene la parte más pura de ciencia ficción. En este primer episodio, ya se nos presenta un nuevo tipo de anfitriones que son realmente perturbadores y que seguro tienen un papel importante de cara a la revolución.

La banda sonora de esta ficción es más que notable. Al comenzar a escuchar las primeras notas de su cabecera ya se nos pone el vello de punta. Y algo que ya destacó en la anterior tanda de episodios fue la utilización de canciones actuales, véase la famosa escena del asalto al salón a ritmo de "Paint it, Black" de los Rolling Stones, que esperamos volver a ver en esta tanda de episodios.

El bueno, el feo y el malo

Uno de los puntos fuertes de 'Westworld' es su elenco protagonista, en el que destacaba en su primera temporada el gran Anthony Hopkins, uno de los ganchos con los que nos vendieron la serie. Por suerte, en el parque se dan cita grandes personajes/actores entre los que destacan El Hombre de Negro (Ed Harris), rol clave dentro del parque, Dolores (Evan Rachel Wood), con su brutal evolución a lo largo de la serie, y Meave (Thandie Newton), uno de los androides más carismáticos de la ficción. Y por encima de todos ellos, en un papel contenido pero lleno de sorpresas y ambigüedad, destacamos a Bernard, interpretado por el siempre efectivo Jeffrey Wright.

Nunca es fácil enfrentarse a una segunda temporada, más si cabe cuando la serie fue presentada como la sustituta de 'Juego de Tronos'. 'Westworld' se lo juega todo con esta nueva tanda de episodios. Después de crear un universo tan rico y con tantas capas, esta secuela podría destruir lo ya visto o ampliar su mitología para coronarse como una de las grandes series del momento. Ingredientes no les faltan y quedan muchas sorpresas por descubrir. Tras el primer episodio, está claro que es una serie con muchísimas posibilidades, pero su gran personalidad no será suficiente para hacer sombra a las obras que la han precedido. Va a tener que sacar toda la artillería y en este primer episodio ya se ha preparado para ello. ¿Estáis listos para entrar de nuevo en el parque? Nosotros ya llevamos las botas puestas.