Francisca le da 48 horas a Saúl para que trate de reencauzar el asunto de los jornaleros

Julieta lamenta su comportamiento con su abuela y Consuelo aconseja precaución ante don Ignacio pero ella no parece querer hacerle mucho caso y se sincera con su padre sin sospechar que esa información puede volverse en su contra.

Es así como Prudencio se ha enterado de que tiene intención de marcharse… Arremete dolido contra Julieta: ¿cuándo me lo ibas a decir? Ella admite que se lo está pensando seriamente.

Nicolás reconoce ante los Castañeda lo preocupado que está y las pocas posibilidades que tiene de ganar, más cuando Severo se declara culpable sin ofrecer ningún arma con la que contraatacar; y el juicio se celebrará mañana mismo. Cuando el abogado neófito le comente a Carmelo las pocas esperanzas que tiene en poder trabajar el caso hacia una sentencia favorable, a éste parece ocurrírsele algo.

Francisca ha dado 48 horas para que Saúl trate de reencauzar el asunto de los jornaleros, pero Larraz y sus hombres insisten en mantener las condiciones: no se moverán hasta alcanzar un acuerdo. Tras un día entero reunidos, Saúl lanza un ultimátum y mete entre los argumentos la ira de Francisca.

Don Anselmo viene a asegurarse de que Nazaria está bien y de que la presencia de Fe no la perturba. Sí se queda lívida, en cambio, cuando su marido le informa de que doña Francisca quiere hablar con ella.

Fe explica bien en qué consiste su negocio y Emilia se ofrece para ayudarle a encontrar un buen local sin que ésta sepa que ya ha iniciado las gestiones para que Gracia le alquile el local que compartía con Mariana.