Crítica 'The Last of Us'

Hay series que marcan un antes y un después en la historia de la televisión, y tengo la sensación que ‘The Last of Us’ es una de ellas. Es fácil acordarse de lo que supuso en su momento ‘Perdidos’ y, en cierto modo, ‘The Last of Us’ utiliza mucho de sus conceptos y los actualiza, esperemos que corrigiendo sus errores.

Porque ‘The Last of Us’ es, hasta ahora, una serie de personajes. Los dos principales, Joel y Ellie, brillantemente interpretados por Pedro Pascal y Bella Ramsey. Ternura, simpatía, miedo, y hasta gracia. La química entre ambos es brutal y ver cómo va evolucionando su desarrollo es tremendamente interesante.

Luego, como en ‘Perdidos’, la serie nos va presentando semana a semana otros personajes. Mediante flashbacks y otras técnicas narrativas. ¿Quién no recuerda la tremenda historia de Rose y Bernard en ‘Lost’? En cierto modo, la historia de Bill y Frank está contada con ese mismo mimo y cuidado a dos personajes que apenas son instrumentales para el desarrollo de la serie. Por supuesto actualizada a las realidades y sensibilidades de hoy en día y con una valentía que ‘Perdidos’ jamás tuvo a la hora de salirse de personajes mucho más normativos.

Unos estaban en una isla desierta. Otros en un mundo post-apocalíptico. En ambos casos el entorno favorecía retratos mucho más íntimos. Sin embargo, ‘Perdidos’ perdió el rumbo y pecó de ir metiendo un sobreexceso de personajes, seguramente presionados por la necesidad de hacer temporadas larguísimas en una serie de network donde los equipos y presupuestos iban fluctuando a gran velocidad.

Por ahora, ‘The Last of Us’ parece mantener esa solidez de tramas e intimidad en los personajes. Las escenas de acción no abundan y, tal vez por eso, pueden recrearse con grandes medios que nos meten de lleno en la trama.

No hay que olvidar que la base, el videojuego del que proviene la historia, es probablemente uno de los juegos más valientes que nunca se han publicado. El material de base era bueno, cierto, pero también estamos acostumbrados a adaptaciones terribles con el único objetivo de aprovechar el renombre de una franquicia (véase ‘Cowboy Bebop’, ‘Resident Evil’ o cualquier adaptación de Netflix).

¿Y ahora qué? Como sucedió en ‘Juego de Tronos’, parece que la serie tendrá que desarrollarse a un ritmo mayor a la publicación del videojuego, siendo su desenlace algo por ahora no escrito en ninguna parte. En el caso de ‘Juego de Tronos’, este hecho y la presión fan acabaron por destrozar una serie que podría haber hecho y de la que nadie parece querer hablar ya. ‘Perdidos’ también fue perdiendo el rumbo a medida que avanzaba. Si ‘The Last of Us’ consigue mantenerlo, estaremos ante una serie muy especial. Todavía más especial.