Fic Ricarjulista || La Nochebuena perfecta... || PARTE 2 || (terminado)

PARTE 1 ~

Según los diccionarios la navidad es una de las festividades mas importantes del cristianismo, festividad que conmemora el nacimiento de Jesucristo en Belén y que se celebra el día 25 de diciembre.
Pero para Ricardo Montero era la época mas mágica y bonita de todas, una oportunidad para estar en familia para olvidarse de todo lo que ocurre en el mundo, para centrarse en lo que realmente importa: La felicidad.

Este año sería diferente, las primeras navidades sin su mujer, y en el fin del mundo, en un barco en el fin del mundo.
Pero algo bueno tendría que tener todo esto, había encontrado a la mujer con la que quería compartir el resto de su vida, Julia Wilson.


Para la doctora Wilson la navidad no suponía tanta felicidad como para el resto de las personas, ya que nunca conseguía estar en casa para celebrarla por culpa del trabajo, pero este año iba a ser diferente.
En el Estrella Polar todos eran ahora una familia y Julia tenía a la que ahora se había convertido en la persona mas importante para ella, Ricardo, el torpe capitán que había conseguido enamorarla.


Julia se estaba arreglando para la cena que se habían organizado en el gran comedor de el buque, la cena de navidad.
Había decidido ponerse el vestido que utilizó para su primera cita con Ricardo, se había pintado los labios con el mismo pintalabios, pero esto de repetir se debía a la sugerencia que le había dado Ricardo esta mañana cuando había hablado con él.



Ricardo llamaba a la puerta del camarote de Julia:

-¿Quién es? -Contestó la doctora desde dentro

-Soy Ricardo

A Julia se le dibujó automáticamente una sonrisa en la cara y se diriguó a la puerta para abrir.

-Hola. -Dijo el hombre al ver a la doctora.

-¿Pasa algo Ricardo?

-No tranquila, es que hoy es nochebuena y venía a avisarte de que vamos a hacer una cena de gala en el comedor. -Ricardo parecía nervioso, pero el simple echo de estar delante de ella le alteraba.

-Muchas gracias por avisarme, porque así tendré tiempo para elegir que me pongo. -Los dos rieron

-Bueno, te pongas lo que te pongas seguro que estás preciosa

-Pero eso lo dices porque tú eres tú... Si fueras otra persona no dirías lo mismo.

-¿A que te refieres con eso? ¿A que estoy enamorado de ti? -Le había costado bastante decirlo pero se había quitado un gran peso de encima, porque lo que más le gustaría a Ricardo es decirle todos los días que la va a querer hasta el fin de sus dias.

-Si que me refería a eso... -Ahora si que no podía parar de sonreir. -Pero aunque me hayas dicho eso... Sigo sin saber que me voy a poner.

-Pues... Tengo una sugerencia, de todos los días que llevamos en este barco el día que mas me gustaste fue en nuestra primera cita.

-¿De verdad? -Julia se iba acercando poco a poco a él mientras hablaba. Después de todo lo que le estaba diciendo lo único que le faltaba era un beso.

-Esa noche estabas realmente perfecta. -Los dos se miraban sonriendo, mientras ella se perdía en el azul de los ojos de Ricardo, él se perdía en la sonrisa brillante y preciosa de Julia, y así estuvieron varios minutos. -Bueno me tengo que ir que me toca guardia y Julián estará empezando a maldecir a todo el mundo

-Está bien, esta noche nos vemos.

Cuando Ricardo se giraba para irse Julia lo agarró del hombró y le dio la vuelta hasta quedar los dos frente a frente.
Julia se puso de puntillas, rodeó el cuello de Ricardo con sus brazos, mientras él la sujetaba de la cintura, y lo besó.

Después de estar poco menos de un minuto besándose en el pasillo Julia se separó de él y le susurró lo que llevaba semanas pensando como decirlo.

-Te quiero. -Ricardo con los ojos aún cerrados sonrió

-Yo también te quiero. -Contestó Ricardo. -Desde el primer momento en el que nuestras miradas se cruzaron.



...CONTINUARÁ...

Ahora me lo leeo y cuando pueda te comento :) Es que tengo un pelin de sueño :P Seguro que está genial.

PARTE 2 ~

-Tripulantes, se que esta Navidad no va ser como esperábamos.
Muchos de vosotros habéis encontrado en este viaje amistad, amor, pero lo que todos hemos encontrado, lo que somos ahora, es una gran familia.
Así que brindemos, por el Estrella Polar.

Los discursos del capitán Montero llenaban a todo el pasaje de esperanza, de manera que levantaron las copas y brindaron, por el Estrella Polar, por la familia que habían formado.

La cena había transcurrido muy tranquila, Ramiro había puesto un poco de música y unos cuantos se habían animado a bailar en pareja.

Ricardo hablaba con Julián, y al acabar la canción que estaba sonando comenzó a escucharse por todo el buque Alone With a Heart, y claro no pudo resistirse.
Se dirigió hacia Julia, estaba conversando con Salomé, Ainhoa y Vilma.

-Doctora Wilson, ¿me concede este baile? -La mujer se giró y vio a Ricardo sonriendo y no pudo evitar morderse el labio mientras se reía.

-Por supuesto capitán.

Ricardo cogió la mano de Julia y la llevó hasta el centro del comedor mientras las mujeres, que hace un rato hablaban con la doctora, se limitaban a sonreír mirando a la pareja y pensando en porque narices habían tardado tanto tiempo en darse cuenta de que se querían.

-Es nuestra canción. -Dijo Ricardo con voz melosa contemplando el rostro de Julia perdiéndose en sus preciosos ojos marrones y en su sonrisa, mientras la sujetaba de la cintura.

-Lo es. -Se limitó a contestar ella a la vez que cerraba los ojos y apoyaba su cabeza en el hombro del capitán y pensando en todos los momentos que habían pasado juntos.

Se querían hasta puntos inimaginables para el resto del mundo, no podían negarlo.





La gente empezaba a retirarse a sus camarotes, era tarde y había sido un día ajetreado organizando la cena, todos necesitaban descansar. La canción acababa de terminar y no podían esperar más:

-Sabes, Valeria me ha dicho que dormirá con Ainhoa en el camarote de las chicas. -Le susurró Ricardo a Julia en el oído.

-¿Es una indirecta verdad? -Contestó ella sonriendo. -Espero que lo sea.

-Se podría decir que si. -El capitán se reía. -Nos vamos. -Dijo mientras le ofrecía la mano a Julia, que aceptó encantada la proposición.





En el camarote Ricardo está tumbado en la cama encima de Julia y besándola, pero de repente se aparta.

-Eh, ¿estás bien? -Le pregunta la mujer con una voz dulce acariciándole la cara con una mano.

-Si, tranquila... Pero, ¿y si no se hacerte feliz? -Ricardo se aparta y se tumba al lado de Julia mirando el techo del camarote.

-¿Pero de que narices estás hablando? -Pregunta mientras se coloca de lado observando al capitán.

-Pues... De que no soy como todos los novios que has tenido... No soy un guaperas, ni un cachas. Soy un cuarentón viudo, con dos hijas y canas en la barba.

Definitivamente, eres tonto... -A Julia le parece increíble que a estas alturas Ricardo aún pueda tener dudas. -Vamos a ver... -Continuaba diciendo mientras se ponía encima de él para que la mirara. -Tienes razón, no eres como mis novios, eres mucho mejor. Porque me encanta tu pelo, tus ojos, tu nariz, tu boca, tu barba canosa, tu cuerpo... Pero es que resulta... -Seguía diciendo cogiendo la cara de Ricardo con sus manos. -Que a mi, me gustas por tu interior, eres el hombre mas cariñoso, sincero, amable y romántico que he conocido en toda mi vida.

No podía articular palabra, lo que le acababa de decir Julia era lo mejor que le habían dicho. No tenía dudas, ahora sabía mas que nunca que Julia le quería realmente.





Ricardo se incorporó hasta llegar a besarla, mientras sujetaba la fina cintura de Julia con sus dos manos, ella comenzaba a desabrochar los botones de la camisa del hombre.
Ricardo dejó que Julia acabara de quitarle la camisa, para bajar la posición de sus manos, desde la cintura hasta las piernas para subir el vestido y quitárselo para dejarlo caer al suelo.
Con un suave movimiento giratorio Ricardo quedó encima de Julia. Mientras él daba pequeños besos en el cuello de Julia, ella se dedicaba a acariciar la nuca del hombre y a disfrutar de las miles de sensaciones que estaba sintiendo en ese instante.
Los pantalones de Ricardo también cayeron al suelo, y la ropa interior de ambos también empezaba a sobrar, pero antes de entregarse completamente Ricardo quería deleitarse unos minutos mas acariciando el cuerpo de la mujer a la que quería.
Comenzó pasando sus manos por el hombro de Julia, haciendo que los tirantes del sujetador se deslizaran, pero no se detuvo ahí, continuó con las caricias trazando un camino desde su cuello hasta su abdomen.
Julia disfrutaba de esas caricias que le erizaban la piel, pero ya no podía mas, necesitaba sentir a Ricardo por completo.





Ricardo rodeaba a Julia con sus brazos, los dos estaban cansados, agotados por lo que hace varios minutos habían realizado entre aquellas sábanas.

-Quiero estar a tu lado todas las noches. -Dijo Julia.

-Yo no me conformo con todas las noches, yo quiero estar todos los días de mi vida a tu lado.


...FIN.

Fuuu, sin comentarios. Que bonito, casi lloro y todo. Me ha parecido tan perfecto. Hija mia, Eva, no se como te lo haces pero escribes tan pero tan bien. Enserio, me encanta tu forma de escribir todo lo que hay alrededor, todo lo que sucede. De verdad, me ha encantado. Y ya sabes que soy tu fan nº1 Y que siempre, siempre, y repito siempre me leeo tus historias. Te mereces más de un aplauso.

De verdad artista, tus relatos son de lo mejorcito. Me ha encantado. Sigue así que lo haces genial. Un besito muy grande. Cuidate muchísimo.

Me ha encantado :) es precioso, todo, desde la cena hasta el "quiero estar todos los días de mi vida a tu lado" son monísimos. Deberías escribir más relatos, escribes genial.

Me superencanto, tienes que hacer otro pero YA.

Muchas gracias por los comentarios :)

El fic: Un día dejé caer una lágrima en el océano. El día que la encuentres, será el día que deje de quererte. Lo seguiré como siempre