Dice sentirse como pez en el agua cuando está entre cámaras, sin embargo, desde hace algún tiempo resulta difícil seguirle la pista a Arantza Sinobas. "No ha sido algo deseado", nos confiesa la presentadora. Tras lograr la popularidad gracias a diversos programas de la autonómica vasca (ETB), la presentadora desapareció de la noche a la mañana. La televisión en estos años ha cambiado y según nos relata cada vez resulta más complicado hacerse un hueco.
Su naturalidad y profesionalidad la devolverán a la pequeña pantalla tarde o temprano, mientras tanto, aprovecha el tiempo libre para seguir formándose y disfrutando de sus muchas aficiones. Arantza Sinobas ha compaginado siempre que le ha sido posible la conducción de programas en TV con su participación episódica en series de éxito como 'Hospital central', 'El secreto', 'Campus' o 'Aquí no hay quién viva'.FórmulaTV.com se ha reunido con Arantza Sinobas y ha charlado largo y tendido sobre el mundo televisivo. En esta entrevista, que ofreceremos en dos entregas, hablamos con ella sobre la situación actual de la televisión, sobre su carrera y sobre los motivos por los que hoy día se mantiene alejada del medio.
Durante años fuiste un rostro muy popular de ETB, sin embargo, desde hace algún tiempo no te vemos en pantalla. ¿Se trata de un retiro buscado o más bien forzoso?
Te aseguro que buscado no es. La televisión es un medio que me encanta, en el que me siento como pez en el agua. Es cuestión del propio negocio que funciona así. De repente, por circunstancias, los programas que podrías llevar empiezan a no cuajar y en esas situaciones los presentadores tenemos más bien poco que decir. Las decisiones se toman en los despachos y no dependen de nosotros, de hecho, en la mayoría de ocasiones no sabemos ni cuáles son los motivos. He hecho pilotos y ha habido proyectos con productoras importantes que llevaban mi nombre pero por circunstancias ajenas mí no han salido adelante.
En esos casos que mencionas, ¿te han dado alguna explicación, te han dicho los motivos por los que los programas no han cuajado?
Muchas veces el formato no ha terminado de salir y en otras ha salido aunque la cadena ha preferido que el conductor fuera otra persona que ya tenía contratada. A veces simplemente no encajas aunque te dicen que te tendrán en cuenta para futuros proyectos.
Cada vez es más habitual que las cadenas grandes confíen todos sus proyectos a presentadores de la casa, sin dar opción al resto. ¿Consideras que es una política injusta?
Sí, porque además produce un fenómeno muy curioso... Hay presentadores que llegan a presentar 2 y 3 programas, a veces con incompatibilidades claras y concisas como fue el caso de Jesús Vázquez que tuvo que dejar 'Supervivientes' para centrarse en 'Operación triunfo'. En cierta manera tiene su lógica, si yo le hago un contrato de larga duración a un presentador y le pago religiosamente un buen dinero lo normal es que trabaje y haga lo que se le mande. Sin duda, es uno de los grandes handicaps que tenemos los presentadores que no estamos en esa situación, los que estamos en el extrarradio. Es muy difícil acceder a las cadenas grandes.
Pero también suele darse la situación contraria en la que ese tipo de contratos perjudica al propio profesional.
Pues sí, de hecho, conozco presentadores a los que ese tipo de contratos les ha perjudicado. Si la cadena no da con un formato adecuado a esa persona, al final el profesional se pasa mucho tiempo sin poder hacer nada. El hecho de tener un contrato de larga duración te impide poder ofrecerte a otras productoras o cadenas. Estos contratos tienen sus pros y sus contras.
Evidentemente hablamos de grandes cadenas porque en las cadenas autonómicas la situación es más bien distinta.
Cualquier televisión pública autonómica maneja un presupuesto mucho más bajo que la pública nacional y, sin duda, muchísimo inferior al de una privada. Las cadenas privadas son empresas que pueden hacer lo que quieran con su dinero, tienen una mayor libertad.
Hasta hace no mucho lo habitual era que el presentador fuese contratado por la productora del programa.
Al principio sí era así, pero últimamente la situación está cambiando, sobre todo, debido a las políticas de las cadenas. Hace años las productoras tenían mucho peso a la hora de elegir al presentador de sus propios proyectos, sin embargo, ahora no es así. Hoy día, las cadenas tienen mucho cuidado con los profesionales que van a ser su imagen. Conozco productoras que se han dirigido a varias cadenas con proyectos que llevaban mi nombre como primera candidata y la cadena no lo ha considerado oportuno. Las cadenas prefieren tirar de gente que tienen en su baraja de presentadores.
Tras las elecciones vascas se ha abierto un nuevo marco dentro de ETB. A veces los cambios traen nuevos aires. ¿Podríamos verte próximamente en algún nuevo proyecto?
Esta profesión es tan loca y curiosa que nunca sabes por dónde pueden llegarte las propuestas. Siempre que se producen cambios en cualquier lugar ves posibilidades, eso es cierto, sin embargo la experiencia vital me dice que las oportunidades están y vienen de cualquier lado. ETB puede ser una oportunidad nueva, pero quien sabe...
En televisión has hecho un poco de todo.
En televisión he hecho prácticamente de todo, la única temática que no he tocado ha sido el corazón. He trabajado en programas infantiles con Fofito y Rody, he hecho sketches, concursos para marcas comerciales, reportajes como los de 'Factor humano', un reality como 'El topo' o programas como 'Los más buscados'.
Precisamente tu última aparición fue en Antena 3, junto a Albert Castillón, en 'Los más buscados'. ¿Cómo recuerdas esa etapa?
'Los más buscados' era un programa de mañana, englobado en el mundo de los sucesos pero con tintes sociales. Fue una época que yo recuerdo con mucha intensidad porque me encargaba de coordinar el tema de redacción y los teléfonos. La participación ciudadana era vital en ese programa. 'Los más buscados' fue para muchas familias una oportunidad enorme tras intentar por otras vías y sin éxito dar con algún familiar desaparecido. Recibíamos todas esas llamadas y se las comunicaba a Albert para que se pusieran en marcha los mecanismos pertinentes que teníamos a nuestro alcance. Era un programa en directo, con una adrenalina satisfactoria. Se trataba de un programa muy cercano a la gente y eso es algo que me gusta porque hacemos televisión para las personas que están al otro lado.
¿Prefieres la adrenalina de un directo a la tranquilidad de un programa grabado?
Yo estoy acostumbrada a trabajar en programas en directo. Empecé en el 88 a trabajar en el concurso diario '3x4' con Julia Otero. Mi bautizo televisivo fue en directo, al igual que la mayoría de los platós que yo he hecho. 'Factor humano' era un programa de reportajes y por lo tanto era grabado, sin embargo, la grabación era en muchas ocasiones como un falso directo. Luego hice otro programa de late night en ETB, con el mismo nombre, que era de 3 horas en directo. Personalmente prefiero el directo, aunque la responsabilidad sea muchísimo mayor. Lo bueno de un programa grabado es que todo está mucho más medido y cuidado.
Una cosa es la presentación y otra la interpretación. Tú has participado como actriz en muchas series, aunque de manera episódica.
Algo que pocos saben es que yo empecé antes como actriz que como presentadora. En el instituto estaba en un grupo de teatro amateur que empezó como algo ligado al centro, y luego cogió entidad propia. Más adelante empecé en televisión como actriz de publicidad. Son dos medios totalmente distintos que no tienen nada que ver. Como presentadora tienes que procurar ser lo más natural posible, mientras que como actriz tienes que interpretar a otras personas. He tenido la suerte de participar en series como 'Hospital central, en 'El secreto', 'Campus', 'Aquí no hay quien viva'...
En estos años no has dejado de formarte. ¿Te gustaría poder retomar tu faceta de actriz?
He tenido la suerte de hacer cursos con gente muy importante como Paco Pino, Miguel Narros o Tamzin Townsend. Siempre me he preocupado de tener la parte de actriz cubierta. Yo empecé haciendo teatro con obras como "Don Juan Tenorio", "Trabajos de amor perdidos" o "La fierecilla domada" de William Shakespeare. Si te apasiona la interpretación y quieres vivir de ello tienes que formarte, no puedes dejarlo aparcada. Yo no he podido hacer una carrera de varios años de arte dramático porque siempre he estado trabajando en televisión. Mi faceta de presentadora me ha impedido tener una formación más larga, pero siempre que el trabajo me lo ha permitido he estado haciendo diversos cursos de menor duración. Es básico que te den unas herramientas para poder trabajar de la mejor manera posible.
¿Hay que vivir en Madrid para trabajar de actriz?
Pues sí, sólo hay que ver los grandes actores venidos de todos los puntos de la península que han acabado en Madrid. Es muy importante vivir en Madrid, aunque eso no te asegure que vayas a tener tu presencia en algún proyecto. Casi todos los mayores directores de castings, de productoras, de platós... están en Madrid. Hay gente que al final, por el tipo de trabajo, acaba marchándose a vivir a Madrid.
En la segunda entrega de esta entrevista (próximo fin de semana), hablaremos con Arantza Sinobas de los cambios que en los últimos años se han dado en televisión, así como de su paso por el game show 'El topo'. Sinobas ostenta el título de haber sido la única mujer en el mundo que ha presentado este intrigante programa de televisión. Fue en Euskal Telebista hace 6 años, en la temporada 2003/04.
