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ENTREVISTA FORMULATV.COM

Alberto Ruiz Rojo: "Lo atractivo de 'El Gordo' es el contrapunto constante de drama y comedia"

El director del Goya al Mejor cortometraje de ficción en 2005 ("Diez minutos") ha sido el responsable de dirigir "El Gordo: una historia verdadera", una TV movie basada en una historia real.

Por RedacciónPublicado: Sábado 27 Marzo 2010 00:00

Antena 3 emite este domingo y el siguiente "El Gordo: una historia verdadera", una película para televisión que narra el giro inesperado que experimenta una familia humilde después de convertirse en millonaria. Como tantas veces se dice, el dinero no da la felicidad, y el premio traerá consigo conflictos familiares que pondrán en peligro su unidad.

La nueva TV movie para televisión de Antena 3 está dirigida por Alberto Ruiz Rojo y basada en la serie "Les Lavigueurs", de la compañía Locomotion Formats, que cuenta la historia real de la familia canadiense Lavigueur, ganadora, en 1986, del premio gordo de la lotería en Québec. Lo que en principio pareció un sueño hecho realidad, acabó convirtiéndose en un drama para la familia.

Original, divertida, cercana y sorprendente son algunos de los adjetivos que su director emplea para describir "El Gordo". FórmulaTV.com ha entrevistado a Alberto Ruiz Rojo para conocer un poco más la historia verdadera que se oculta tras este emocionante relato.

¿No es raro hablar de El Gordo a las puertas de la Semana Santa? Antena 3 tenía intención de estrenar esta TV movie durante las pasadas Navidades. ¿Qué ha sucedido para que se haya retrasado tanto su emisión?

Es verdad que en un principio se pensó en el 21 diciembre por la temática de la lotería, pero finalmente los responsables de la cadena estimaron que era mejor esperar un poco. Todo obedece a razones estratégicas, buscando siempre el mejor momento en un negocio tan competitivo. De todas formas lo que les toca son 18 millones de euros al Gordo de la primitiva, o sea que da un poco igual la fecha.

Cuéntanos Alberto, ¿qué es lo que más te ha atraído de este proyecto? ¿Cuál es la razón por la que aceptas dirigirlo?

Cuando me llamó Antonio Saura de Zebra para proponerme el proyecto, lo primero que me interesó fue sin duda el guión. Es una historia con muchos matices, muy humana que habla de las debilidades y los sentimientos, en este caso dentro de una familia y sobre que es realmente lo que importa o más puede hacernos felices y que definitivamente no tiene por que ser el dinero.

Esta historia está basada en hechos reales, de hecho ha inspirado a una serie. ¿Crees que eso le resta interés a la TV movie?

Para nada. La historia real sucedió en Canadá en los 80, allí es muy conocida pero aquí, en España, apenas se sabe nada de ella, por lo que creo que el suspense está garantizado.

Todo proyecto de este tipo cuenta con un grado de dramatización importante. Además en este caso "El Gordo: Una historia verdadera" es a su vez la adaptación de la versión canadiense de 'Les Lavigueur'. ¿Hasta qué punto habéis podido hacer vuestra la historia? ¿Qué grado de libertad habéis tenido a la hora de desarrollar el proyecto?

Un margen bastante amplio. Hemos partido de los guiones originales, que a su vez estaban basados en un libro escrito por uno de los hijos. La miniserie original es de 6 capítulos, así que aquí los guionistas Felipe Mellizo y Luis Arranz hicieron un trabajo estupendo de condensar toda la historia y adaptarlo a nuestra cultura española. El resultado es una narración con un ritmo trepidante.

¿Llega a sorprenderle a uno la historia que está contando?

Increíblemente sí. La primera vez que leímos el guión con los actores y durante los ensayos, me sorprendí de la cantidad de cosas que iban saliendo. Pequeños detalles sobre la composición de los personajes y sus deseos y debilidades que son al final lo que le da profundidad a la narración.

"El Gordo" es una miniserie con una historia intrigante y desgarradora, pero sobre todo emocionante...

La originalidad de esta historia está en el enfoque. Estamos acostumbrados a que las pelis donde a alguien le toca la lotería sean en clave de comedieta tontorrona. Aquí justamente juega un sentido muy realista, de cómo algo así puede ser absolutamente trascendental hasta el punto de cambiarte la vida. El contrapunto constante de drama y comedia la hace muy atractiva.

¿Si tuviéses que describirla qué dirías de ellas? ¿Qué intenta mostrarnos?

Según una estadística el 80% de las personas a las que les toca en la lotería una gran suma, acaban arruinados o más infelices que lo que eran. Por supuesto, siempre pensamos que eso "a nosotros no nos va a pasar". La película reflexiona sobre los valores reales, cómo el dinero lo corrompe todo y qué es lo que de verdad consigue hacernos felices... que no es otra cosa que "el que nos quieran".

El proyecto cuenta con unos rostros muy televisivos, sin embargo, hoy día eso ya no es suficiente garantía de éxito. ¿Qué tiene "El Gordo" que la hace interesante?

Un enfoque original, una historia divertida y emocionante, muy cercana, muy real y a la vez sorprendente. Un ritmo trepidante en cómo avanza la historia, una interpretación con una gran calidad y homogeneidad en todos los actores, algunos de ellos muy poco conocidos en España como Antonio Gil, el protagonista, que hace un trabajo soberbio. Luego está la familia: Alex Barahona que esta estupendo en un papel nada fácil; Joaquín Climent que hace un cuñao más que entrañable; Oona Chaplin, con un talento para la comedia estupendo, aparte de una atractivo natural que atrapa; y Natalia Moreno que tampoco es muy conocida y hace un rol de hija adolescente "díscola" con una gran maestría.

Cuéntanos, ¿Cómo ha sido el rodaje de "El Gordo"? ¿Alguna complicación fuera de lo habitual?

La verdad es que ha sido un rodaje modélico, como pocas veces pasa. Todo fue sobre ruedas. Tengo que agradecer muchísimo a la productora que me dejara contar con mi equipo habitual de colaboradores (Dani Sosa en la foto, Juan Borrell en el sonido, Jesus Valera y Arturo Ruiz en la cámara, Sonia Nolla en la dirección de Arte, etc) y también el increíble trabajo del equipo de producción comandado por Alicia Telleria. Cumplimos el plan de producción de 5 semanas escrupulosamente, sin irnos de la hora ni un solo día. Yo soy un gran defensor de cumplir los horarios. Los equipos descansados y que duermen rinden el doble.

Mucha parte del rodaje lo hicimos en la calle en el barrio de Carabanchel, era verano y allí nos convertimos en toda una atracción. La gente se quedaba fascinada viendo aquella cabeza caliente de 8 metros. Teníamos a medio barrio asomado a los balcones, pero con un gran respeto, sin decir ni "pío". No sé si en La Moraleja habríamos tenido la misma suerte.

¿Satisfecho con esta apuesta de Antena 3?

Claro, me parece estupendo. Creo que es importante abrir géneros y no concentrarse sólo en temáticas a priori más comerciales como puede ser la vida de personajes muy conocidos.

Como director, ¿qué tiene para ti de positivo este tipo de proyectos?

Sobre todo poder cuidar más el producto en un rodaje más parecido al de una película, con un proceso completo de producción de alrededor de seis meses, pudiendo tener más tiempo para cuidar la preparación (localizaciones, casting, etc. ) y, sobre todo, poder ensayar semanas con los actores... todo un lujazo en televisión.

¿Cuáles son las mayores diferencias que encuentra un director a la hora de rodar una serie, una película o una TV movie como "El Gordo"?

En principio los calendarios de producción. Una peli de 100' se está rodando más o menos en 7-8 semanas, una movie de 150' en 5-6 semanas y un capitulo de una serie de 70' en 10-12 días. Y por supuesto el presupuesto, digamos que una TV movie está en el camino intermedio entre una serie y una película. El lenguaje también cambia: en televisión se exige más ritmo, las tramas deben dispararse antes y avanzar mas rápido, todo por evitar el zapeo.

¿Crees realmente que las TV movies son una buena escuela para dar el salto de la TV al cine o del cine a la TV. ¿Podría hablarse de una transición entre ambos medios?

Tal como está el mercado audiovisual ahora mismo, hay un tráfico absoluto en todas direcciones, tanto en técnicos, directores y, por supuesto, actores. En lo que a mi respecta, espero que está TV movie me ayude a poder rodar próximamente mi primer largometraje.

¿Hablamos de una moda pasajera o las TV movies han llegado para quedarse?

Hay dos temas. Por una parte, se ha demostrado que cuando los productos son de calidad, hay un público para ellos. Por otra parte, el futuro de las TV movies parece que dependerá bastante de la redacción final de la Ley del audiovisual y como se establezcan los porcentajes que las televisiones tienen la obligación de invertir.

Tienes un Goya y más de 140 premios por el cortometraje "Diez minutos". La clave de su éxito -decías hace algún tiempo- está en la identificación tan absoluta que hace el espectador con la historia que se cuenta. ¿Puede el espectador buscar en "El Gordo" ese tipo de identificación?

Por supuesto que puede existir la misma identificación, principalmente por que lo que les pasa a los personajes. Le podría pasar a cualquiera, aunque nos sea literalmente que te toque la lotería Todos los componentes de la Familia "Hidalgo" tienen muchas virtudes pero también grandes defectos y es eso justamente "los defectos" de los personajes lo que crea la empatía del espectador.

Hablando del corto, "Diez minutos" ostenta un curioso récord... Es el corto más premiado de la historia de España. ¿Qué supone o ha supuesto este corto en tu carrera?

Desde luego hay un antes y un después de "Diez minutos" en mi carrera. La cantidad de premios y reconocimientos fue desbordante. Para mí es una buena carta de presentación porque es una obra absolutamente personal, con un guión propio y que yo mismo produje, así que la hice con un grado de libertad absoluto. Lo que está claro es que un éxito así no sirve de nada sino viene uno después, y espero que vengan muchos, empezando por "El Gordo".

Has dirigido, entre otros, dos grandes proyectos de ficción televisiva que tuvieron una aceptación muy diferente por parte de la audiencia: 'Al salir de clase' y 'Quart'. Hoy día, las ficciones juveniles diarias no terminan de encontrar su hueco. ¿Qué falla?

'Al salir de clase' creo que condensó en su momento muchas cosas que conformaron su increíble éxito (llegamos a más de ¡1100 capítulos!). Fue un producto novedoso en su momento, con un montón de talento joven, empezando por los actores y también por los que estábamos detrás: productores, guionistas, directores, etc. Lo que tienen las series diarias es que son una magnifica escuela. En más de 200 capítulos que dirigí te da tiempo a probar prácticamente todo, y llegamos a ser muy osados. Recuerdo hasta haber rodado secuencias complicadísimas de acción, con lanchas, helicóptero... y todo en una mañana.

'Quart' fue una interesante oferta de Antena 3 que, sin embargo, no logró "atrapar" a tantos espectadores como se esperaba.

La verdad es que era una serie que se merecía otra suerte. Los guiones eran muy interesantes y Roberto Enríquez hizo un trabajo estupendo. Aparte se hizo un esfuerzo en cuidar la factura, rodando en cine. Curiosamente, cosas del destino, el estreno coincidió con otra serie que yo dirigía 'Hermanos y detectives' que fue quien ganó la partida.

Algún productor nos contaba no hace mucho que las cadenas de TV están abusando demasiado de los típicos personajes del corazón para hacer este tipo de películas. ¿Qué opinión tienes al respecto?

Creo que lo mejor es que haya riqueza en las temáticas. Obviamente a las cadenas les interesan este tipo de historias, primero por que las TV movies al ser sólo dos capítulos necesitan partir de un universo conocido que sirva de reclamo para el espectador y también porque este tipo de contenidos sirve para alimentar la parrilla un par de semanas en programas de todo tipo. El problema de los biopics es que para evitar demandas, de alguna manera tienen que ser biografías "autorizadas" y eso a veces limita la fuerza que podrían tener este tipo de historias.

Por cierto, ¿acaba uno por compadecer a la familia protagonista de "El Gordo?

Algo mucho mejor que la compasión, y es que te pones en su piel y acabas por pensar: "Ojalá me tocaran 18 millones de euros a la lotería y si no me tocan pues tampoco está tan mal, porque mira lo que me puede pasar".

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