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Telecinco estrenó el pasado mes de noviembre 'Rojo y negro', un espacio semanal presentado por Nacho Abad que ha logrado hacerse un hueco en la complicada franja del late night. A pesar de sus constantes cambios de emisión, el programa ha logrado cada semana seducir a más de un millón de espectadores.
Los sucesos más relevantes de la actualidad informativa y un análisis profundo de sus peculiaridades han sido durante estos meses los ejes estructurales del programa. Dirigido por Antonio Robles, 'Rojo y negro' ha pretendido en cada emisión analizar y ampliar los detalles sobre los diversos sucesos que han tenido lugar en la crónica negra."El programa ha logrado adelantarse a ciertas informaciones antes que otros medios, hemos logrado importantes entrevistas en exclusiva... los medios han hablado de 'Rojo y negro' y eso es muy buena señal", remarca Robles. "El espectador nos ha recibido bien y hemos demostrado que este tipo de género cuenta con una audiencia muy fiel". Tan bueno ha sido el resultado final que Telecinco ha decidido renovarlo.
FórmulaTV.com ha entrevistado a Antonio Robles aprovechando el fin de temporada. El director del espacio nos cuenta algunas curiosidades del programa, y aprovecha para criticar a quienes sin verlo se dedican a descalificar este tipo de trabajos.
'Rojo y negro' está a punto de finalizar su emisión en Telecinco. ¿Cuál es el balance de la temporada?
El balance es extremadamente positivo. Empezamos el 12 de noviembre, llevamos 26 programas y una audiencia media superior al millón de espectadores. Telecinco y Cuarzo han conseguido que los espectadores y la opinión tengan un programa de referencia sobre la crónica de sucesos en televisión. A lo largo de todo este tiempo, 'Rojo y negro' ha presentado muy buenas informaciones relacionadas con este tipo de género informativo.
¿Qué tiene para ti mayor valor, mayor repercusión?
Recuerdo la entrevista que hicimos en exclusiva con Pepe "el del Popular", la primera tras su regreso a España; la del padre de Eluana, que llevaba en estado vegetal diecisiete años; la entrevista con Ameneh, a la que echaron ácido en la cara y ahora la ley iraní le permitía que le echara ácido en la cara a su agresor... La experiencia de 'Rojo y negro' ha sido positiva. Creo que el programa ha tenido una importante repercusión social. Hemos logrado que se hable del programa fuera de la propia cadena y eso es muy bueno. En ocasiones se nos ha citado en el resto de medios de comunicación y eso no es tarea sencilla. En ocasiones, el programa ha logrado adelantarse a ciertas informaciones antes de que salieran en otros medios.
'Rojo y negro' se despide de la audiencia. ¿Volverá el programa con nuevas entregas la próxima temporada?
Según la información que yo tengo, haremos una parada ahora en julio y descansaremos durante el mes de agosto. Regresaremos en septiembre.
El programa aterrizó en noviembre en el late night y casi de manera inadvertida se ha convertido esta temporada en uno de los formatos con mejor rendimiento en su franja. 'Rojo y negro' ha superado con creces a otras ofertas como 'La tribu' de Sardá. ¿Os esperabais una acogida tan buena?
El mundo de la televisión es muy complejo, por ello la gran mayoría de nuevos programas fracasa. Poner en marcha un programa, en cualquier franja, y que funcione es algo de lo que se tiene que alegrar cualquier profesional. La verdad es que el espectador nos ha recibido bien. Hemos demostrado que existe un público fiel a este tipo de género, a este tipo de de informaciones.
El programa ha jugado con el directo, y ese ha sido uno de sus atractivos. ¿Por qué esa apuesta?
Para nosotros el directo es fundamental. El directo nos permite estar en los lugares en los que han tenido lugar los sucesos durante la semana y nos permite hablar con los protagonistas de las noticias. El espectador se hace una idea más cabal de lo que ha ocurrido. A través del directo, de las conexiones, acercamos al espectador todo lo que está sucediendo. 'Rojo y negro' es un programa informativo y el directo es una de sus bazas. Nosotros utilizamos todos los elementos de los que disponemos para acercarnos a la información y después transmitirla.
Cuando se habla de sucesos, de crónica negra, siempre existe la posibilidad de caer en el morbo. ¿Dónde están los límites?
Nosotros nos desplazamos con las cámaras de televisión a un lugar en el que se ha producido un crimen y grabamos las imágenes. Son imágenes en movimiento, donde seguramente aparecerán restos de sangre. Es mucho más escandaloso grabar la imagen que tomarla con una cámara, las cosas son así. Sin embargo, la televisión en general y 'Rojo negro' en particular se pone límites a la hora de narrar determinadas cosas. Nosotros, por ejemplo, no hemos contado exactamente como murió Marta del Castillo, así como tampoco hemos dado detalles sobre violaciones o asesinatos. Disponíamos de esa información como todos los medios y nosotros renunciamos a ello. No obstante, se tiende a pensar equivocadamente que los medios de comunicación, sobre todo, la televisión utiliza estas cosas para conseguir audiencia y es mentira. Ni los griteríos en un plató o unas lágrimas en un determinado momento provocan una subida de audiencia. Llevo realizando televisión desde hace más de 15 años y te puedo asegurar que eso no es verdad. El espectador constantemente te está dando lecciones de humildad y cada día te enseña los errores. Podemos pensar que una noticia con unos elementos escandalosos puede atraer a los espectadores, pero los datos de audiencia te demuestran que no es así. Si supiésemos exactamente lo que funciona en televisión todos lo haríamos. Los que nos dedicamos a este medio sabemos que si algo no funciona nos retiran.
¿Por qué crees que se critica tanto la crónica rosa como la crónica negra?
Me asombra muchísimo la gente que dice que no ve en televisión ni un género ni el otro. Los índices de audiencia contradicen este tipo de afirmaciones. Me gustaría que los que en ocasiones nos critican con tanta ligereza y frivolidad se sentasen a ver este tipo de programas con cierto detenimiento. Si en televisión nos dedicásemos a analizar las crónicas periodísticas de nuestros compañeros... las cosas serían muy diferentes. Hay buena información rosa, negra, económica, deportiva, de espectáculo, de cultura... así como también la hay mala ya sea en prensa, en radio o en televisión. Hay profesionales que en ocasiones nos equivocamos pero te aseguro que todos estudiamos en la misma facultad de periodismo. No hay que satanizar.
El programa está presentado por Nacho Abad, todo un experto en sucesos. 'Rojo y negro' es un programa creado a su medida.
Pues sí. Para los espectadores de Telecinco Nacho Abad es una de las personas más creíbles en esta materia. Lleva mucho tiempo dedicado a este género de la información, tiene muy buenas fuentes y eso le ha permitido avanzarse a muchísimas informaciones. Su presencia juega a nuestro favor. Cuando alguien te contrata lo hace por tu profesionalidad, pero también por tu agenda, por tus fuentes, por tu método de trabajo... Nacho es uno de los principales activos del programa. Además, tenemos la suerte de contar con una redacción que se desvive por hacer su trabajo lo mejor que sabe.
El programa se ha emitido en martes, miércoles, viernes y domingo. Con tanto cambio resulta complicado fidelizar a la audiencia, pero a su vez refleja la confianza de la cadena en el formato.
Es la cadena la que según sus necesidades decide cuando quiere emitir el programa. El hecho que tenga esos datos de audiencia significa que dispone de un público muy fiel. Este tipo de información interesa a un amplio número de espectadores, hay gente que necesita tener más detalles sobre un determinado tipo de noticias.
¿Cómo fue el salto de la crónica social a la crónica negra? ¿Qué fue lo más llamativo?
Personalmente fue más importante dejar Radio 9, donde era editor de informativos, para dirigir 'Sabor a ti'. Yo soy periodista, siento curiosidad por la información, por las cosas, y eso es lo único importante, no el tipo de información que trabajes. Si un día tengo que entrevistar a un ministro trataré hacerlo igual de bien que si me toca entrevistar al padre de Marta del Castillo. Trato de hacer mi trabajo lo mejor que sé.
¿Qué criterios seguís a la hora de elegir los temas que abordáis cada semana?
Yo siempre trabajo en equipo, siempre hago reuniones de redacción y cada uno de nosotros aporta su propio tema, su propia información. Luego están los temas que provienen de la misma actualidad. Hacemos una puesta en común sobre las cuestiones que creemos que más pueden interesar al espectador y que más recorrido pueden tener. Tenemos que aparecer continuamente con información novedosa, de lo contario no nos sirve. De un programa semanal se espera que sea capaz de aportar aquello que complemente la información diaria. A veces añadirle un poco de análisis.
¿Cómo recibisteis la noticia de que 'Rojo y negro' pasaba a emitirse los viernes, contra 'DEC?
(risas) No me hizo especialmente feliz tener que competir con otro espacio de mi propia productora. Pasado el efecto sorpresa, intentamos hacer el mejor programa que supimos hacer, siempre teniendo en cuenta que 'Rojo y negro' no tiene los ingredientes de los que dispone 'DEC'. No competíamos en igualdad de condiciones. Nosotros tratamos de hacerlo lo mejor que supimos, además excepto un día que pegamos un patinazo tampoco nos fue especialmente mal.
Dejaste a 'DEC' en muy buenas manos. ¿Fue una petición expresa que tomaras las riendas de 'Rojo y negro'?
Yo soy una persona que trabaja para Cuarzo, si la productora me pide que lo haga, yo lo hago. Estoy contento, es verdad. Estoy contento de dejar en mi subdirector las riendas de 'DEC', igual que cuando abandoné 'Sabor a ti' y lo dejé en manos de mi subdirectora que luego durante años ha sido la directora de 'El programa de Ana Rosa'. Igual que cuando hicimos 'Rumore y rumore' o 'Abierto al anoche' y los dejé en manos de Adrián Madrid que luego hizo 'Aquí hay tomate' o 'La noria'. Estoy contento de tener la suerte de poder trabajar con profesionales que más tarde han demostrado que han aprendido lo mejor de uno y han sido capaces volar solos.
¿Cuántas personas forman el equipo de 'Rojo y negro'?
Somos 9 redactores, una subdirectora, 3 guionistas y 5 más en producción. Trabajan 18 personas para 'Rojo y negro'.
¿Qué habéis querido reflejar con el nombre del programa, 'Rojo y negro'?
Negro por el nombre que recoge la crónica de sucesos y el rojo un poco por la sangre, por la pasión. En este tipo de programas abordas multitud de sucesos que tienen como móvil una pasión (la codicia, el sexo, la venganza...) y eso lleva a muchas personas a cometer un asesinado, una violación, un fraude... De ahí el nombre.
