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Avanza con éxito de audiencia el nuevo drama legal de la ABC, 'How to Get Away With Murder', que en su último episodio ha conseguido superar en los demográficos a 'Scandal', otro de los productos de Rhimes. La serie, en su segundo capítulo de un total de -por ahora- 13, va tomando forma y sentando sus bases.
El excéntrico millonario
En el presente capítulo, volvemos al pasado para ir averiguando lo que ocurrió con el marido de la profesora Keating. Concretamente, viajamos dos meses y medio antes de que la tragedia se cerniera sobre la Middleton Law School en forma de crimen. Por ahora, los estudiantes protagonistas de nuestra serie siguen viviendo de forma moderadamente tranquila, ayudando a su querida profesora en los casos que les manda.
Esta vez, Annalise Keating quiere que sus alumnos pongan todo su empeño para defender a un adinerado hombre, acusado de apuñalar repetidas veces a su mujer. Sin embargo, la defensa no será nada fácil, porque el propio ricachón admite haber asesinado a su primera esposa en Suiza, con lo que su inocencia en esta segunda muerte parece muy difícil de probar.
Afortunadamente, el equipo de élite de Keating (esta vez una Laurel necesitada de afecto laboral) demuestra que ambos asesinatos se cometieron con técnicas muy diferentes. El primero, con un conocimiento sobresaliente de anatomía (debido a la tremenda afición del millonario hacia la caza), y el segundo, de forma realmente chapucera, y con demasiado ensañamiento. Así pues, la defensa gana el caso, y el acusado queda libre. Además, Wes le comenta a su profesora la posibilidad más que real de que fuera la hija del excéntrico adinerado la que cometiera el crimen.
Peleas de no enamorados
No podemos olvidarnos del caso Lila Stangard, aquella chica desaparecida que fue encontrada recientemente fallecida en el tanque de agua de una fraternidad universitaria. La joven, que ya sabemos que ha sido asesinada, era alumna de Sam, el marido de la profesora Keating, y ella no acaba de tener claro cual era la relación entre ambos.
Por ello, mientras Sam está en la ducha, Annalise le espía el móvil, en busca de correos electrónicos enviados por Stangard. Descubre unos cuantos, y el único que ella lee es aparentemente inofensivo, pero hay algo que no le gusta en todo eso. Después de tener una pelea marital en la que la profesora le pregunta directamente si había algo entre ellos (a lo que él responde que no), ella aprovecha otro momento en el que su marido no está en la misma habitación para volver a revisar sus e-mails. A Keating no le tranquilizará nada saber que Sam ha borrado todos y cada uno de ellos.
Un crimen cada vez más intrigante
Desde luego, es de vital importancia hablar sobre el asesinato que parecen haber cometido los alumnos aventajados de la clase, cuya víctima era, nada más y nada menos, que el marido de la profesora Keating. Esta vez, vemos a Wes dejar solos a sus compañeros con el cadáver en más de una ocasión. En una de ellas, el joven estudiante aprovecha para llamar a alguien con el móvil, para decirle a esa persona que la van a proteger.
La relación de Wes con la vecina también va avanzando. Ella se da una ducha en su casa, y el joven descubrirá que la chica ha ocultado un móvil en su baño. Al final del capítulo, de vuelta al presente criminal, Wes conduce hasta un motel, y entra en una habitación en la que está alojada Rebecca, su vecina, a la que tranquiliza diciendo que ya ha pasado todo. Lo último que sabemos de ella (en la línea temporal de hace dos meses y medio), es que es detenida por el asesinato de Lila Stangard junto al novio de la chica fallecida, que es el chaval al que vimos salir del piso de Rebecca en el episodio anterior.
Conclusiones
Parece que mucha gente disfrutó del piloto de 'How to Get Away with Murder', si no fuera así no creo que tantas personas hubiesen estado dispuestas a seguir viendo el segundo capítulo. No es ningún secreto que a un servidor no le hizo especial gracia el episodio inaugural de la serie, con un bombardeo de información frenético y demasiados personajes aparentemente planos.
Sin embargo, parece que el rumbo que está tomando el show con el último capítulo es lo que debe hacer. No es que hayan dejado de darnos información, pero todo se está haciendo de una forma más calmada, sin que eso signifique que el ritmo de la serie vaya decreciendo.
El caso episódico que investigan la profesora y su inexperto equipo de jóvenes es mucho más atractivo, y cada vez nos intriga más saber cual era la relación entre Sam y Lila Stangard, así como también averiguar cual es el secreto que esconde la enigmática Rebecca. Para no perdernos ni uno solo de estos detalles, seguiremos viendo 'How to Get Away with Murder' con mucha atención.
Próximo capítulo
El siguiente episodio se llamará "Smile, or Go to Jail", y se emitirá en Estados Unidos la noche del 9 de octubre. El equipo de Keating tendrá que ayudar a una madre detenida por el FBI, así como también la profesora tendrá que pensar muy bien si representar a Griffin O'Reilly, el novio de Lila Stangard acusado de su asesinato.
