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Los protagonistas de 'The Walking Dead' han pasado por muchas cosas a lo largo de cinco temporadas, han perdido a seres queridos y han llorado sus pérdidas; parece que el episodio trece titulado "Forget" muestra su buena adaptación a las novedades surgidas en sus vidas y su llegada a un lugar mejor. ¿Quién se anima a comentarlo con nosotros?
Sasha contra el mundo
A pesar de tener episodios emotivos en la presente temporada, un ejemplo claro fue el adiós necesario a Beth (Emily Kinney) y Tyreese (Chad L. Coleman), "Forget" no se encuadra en ese aspecto. 'The Walking Dead' se deja llevar por la apacibilidad de Alexandria convirtiéndose en uno de los capítulos más innecesarios de la temporada.
Sasha sigue sin adaptarse a vivir en Alexandria
Es cierto que la serie nos suele dar una cal y una de arena, capítulos memorables y otros que deseamos borrar de nuestra mente. A veces la tranquilidad es necesaria y los zombis no deben congregarse en la totalidad de escenas, pero Alexandria es más aburrida de lo que pensábamos. Todo se vuelve demasiado ideal, idílico y perfecto para ser real y Sasha (Sonequa Martin-Green) es la primera en manifestar sus sentimientos.
La chica muestra una actitud muy realista cuando observa que sus 'nuevos vecinos' se preocupan más por hacer una comida favorita o ir al dentista que por sobrevivir. Quizás estar tanto tiempo fuera luchando por seguir adelante, perder a Bob y a su hermano, le ha hecho ver las cosas desde un punto de vista diferente al resto. Diferente pero real.
Reuniones clandestinas y aceptación
Carol, Rick y Daryl no se fían de esa vida aparentemente perfecta y normal de Alexandria. Les vemos hacer reuniones clandestinas, en un intento por conseguir las armas necesarias si las cosas se tuercen. ¿O tienen un plan mejor? Es normal que no confíen en Deanna (Tovah Feldshuh), la líder no puede ser tan buena como parece.
Aaron ha ofrecido a Daryl un trabajo: ser reclutador
Carol (Melissa McBride) se ha adaptado bien al entorno, nuestra camaleónica y nueva Bree Van de Kamp hace tartas, se preocupa por sus vecinas alocadas y no sabe disparar. Pero bajo esa fachada se esconde la verdadera Carol, aquella capaz de asustar a un niño pequeño (buen monólogo) para guardar el secreto que descubriría sus intenciones. Esa es nuestra Carol, que no nos la cambien.
Otro 'intruso' de 'The Walking Dead' que tampoco se adapta a su nuevo hogar es Daryl (Norman Reedus). El chico no encuentra su lugar allí pero una jornada con Aaron (Ross Marquand) le hará replantearse ciertas cosas cuando le ofrece un trabajo diferente donde estará alejado de la gente y la falsedad que se respira en el ambiente: será el nuevo reclutador de Alexandria.
¿Nos vamos de fiesta?
Deanna organiza una fiesta de bienvenida para nuestros protagonistas, una celebración donde todos han comenzado a adaptarse a sus nuevas vidas. Rosita (Christian Serratos), Abraham (Michael Cudlitz), Noah (Tyler James Williams), Glenn (Steven Yeun), Maggie (Lauren Cohan) y Carl (Chandler Riggs) no han tenido problemas en olvidar el pasado y centrarse en el presente. Al fin y al cabo el episodio se llama "Forget" por una razón ¿no?
Nuestros protagonistas continúan sin confiar totalmente en Deanna
Rick y Michonne también han evolucionado. Los nuevos alguaciles, policías o sheriff del lugar han cogido el trabajo con ganas. Rick (Andrew Lincoln) se centra en sus hijos (por fin) al mismo tiempo que empieza a hacer buenas migas con cierta rubia-vecina casada y con hijos. De esto no puede salir nada bueno y lo sabe desde principio. Aunque ya sería hora que nuestro Grimes encontrará el amor tras Lori.
Michonnne (Danai Gurira) es uno de los personajes que se esfuerzan en olvidar con más fuerza, ve lo bueno del presente y se centra en ello. Ha sido increíble ver como colgaba su katana en la pared de su casa, intentando cerrar un ciclo de muertes sin fin. Ahora es sheriff, cuyas misiones pasan por patrullar los muros, cuidar de los niños y resolver conflictos. ¿Se adaptarán bien a su nueva existencia? ¿Qué creéis vosotros?
