Crítica '¡Qué tiempo tan feliz!'

Es una vergüenza ver cada fin de semana como cada vez que el grupo de triunfitos que componen el cuarteto de Que Tiempo Tan Feliz tiene que salir a playbakear, ni siquiera saben mover la boca tal y como marca un playback. Por favor, que hay mucha gente en paro esperando a trabajarselo de verdad y no hacer esta pantimima. Es vergonzoso ver como Jon Allende se pasa toda la actuación mirando de un lado a otro para disimular porque no se sabe las canciones. Como Fran Dieli se escuda continuamente en Anabel porque igualmente tampoco se lo ha currado. Por favor, que pongan cantantes profesionales frente a las cámaras de un programa con tanta audiencia como éste. ¡Un respeto a la audiencia!