EN EL PAÍS DE LOS CIEGOS...

'Gran Hermano 17': Meritxell se luce con su clase sobre la Guerra Fría a sus compañeros

Sus compañeros no recuerdan haberlo estudiado y demandan a la catalana una clase.

Por Redacción El 12 de Noviembre 2016 | 12:53

'Gran Hermano 17' no se nutre únicamente de polémicas discusiones, amoríos de todo tipo y bromas de mal gusto, sino que los habitantes de Guadalix, muy de vez en cuando, dejan un espacio dedicado a la cultura y el desarrollo personal. Por ello, las fotografías que decoran la casa son objeto de curiosidad para los concursantes encerrados, donde entre todos encuentran el origen de tan llamativas imágenes.

Meritxell, estudiante de magisterio, ha demostrado su afición a la enseñanza usando a sus compañeros de "conejillos de indias", tal y como ellos pidieron. La catalana explicaba a Alain, Miguel, Adara y la nueva incorporación Simona, el porqué de la obra del artista ruso Dimitri Vrúbel en el muro de Berlín "El beso": "¿Habéis estudiado lo que es el muro de Berlín? ¿Sabéis un poco lo que es? Era que estaba un muro, que separaba toda la zona de América y todo eso", ilustraba. Meritxell sabía de lo que hablaba pero no matizó lo que dijo ya que la concursante se refería a la división que el muro provocó entre la parte soviética y la parte más occidental.

Una explicación de lo más razonable para el resto que ni siquiera recordaban el concepto de Guerra Fría, "Lo estudiasteis ¿eh?", apuntaba Miguel a lo que Adara negaba, "Pues no me acuerdo chaval" mientras la pantera continuaba con la clase. "Eso fue hasta que los obreros, digamos, se hartaron y comenzaron a destruir el muro entero. Imagínate lo que es un muro entero que separe todo. Es increíble. Y aún quedan restos de ese muro. Aún hay gente que sufrió mucho por todo aquello, fue una revolución increíble", explicaba. Una situación que bien refleja aquello de en el país de los ciegos, el tuerto es el rey.

Noches de pasión con Alain

Los últimos encuentros sexuales de la catalana y el francés están dando mucho de qué hablar, puesto que Meritxell se encuentra en una continua montaña rusa de emociones, ahora sí, ahora no... Y es que tras tres noches de pasión bajo el edredón de Guadalix, la concursante está empezando a cansarse de la actitud de su presa: "No me gusta estar así con alguien que solo me busca por la noches".

Una reflexión que poco bagaje suele durarle a la pantera, puesto que en cuanto tiene a Alain cerca se derrite entre sus manos. Una situación que se convierte en un arma de doble filo contra la catalana, cuyos sentimientos y su falta de actitud a la hora de ponerse en su sitio pueden terminar pasándole una mala jugada.