'House of Cards' 5x10 Recap: "Chapter 62"

Romero consigue ser coordinador de la bancada demócrata en el congreso mientras Francis está al límite por la re-apertura de su investigación. Al menos tiene a Usher como aliado presionando a Romero a base de chantajes, recordándole su confabulación con Conway en campaña.

"Chapter 62"

Claire quiere que el cuerpo del americano que trabajaba con los rusos se pierda en aquel submarino sin dejar rastro. Con esto se enterraría su maniobra con chinos y rusos. En la situación en la que están los Underwood es vital evitar que aparezca cualquier nuevo escándalo. En eso mismo anda Jeffries ya que el periodista visita a la secretaria de salud que permitió que Frank tuviera el riñón que iba a ir para Moretti. Le contará todo lo que ha averiguado a Claire queriendo con esto dejar tocado a Doug. El periodista parece que quiere, a base de chantajes, trabajar en la Casa Blanca.

Jane Davis sigue enredando, lo hace con LeAnn cuando le pregunta acerca de Macalllan, y con la vicepresidenta. La nueva asesora quiere seguir con la estrategia del miedo dejando que se produzca un ataque en Homs que justifique una posterior intervención militar. El cinismo que le sobra a Davis quizás le falte a la secretaria de estado. Catherine Durant se limita a decirle a su asesora que quizás deberían evitar esas muertes. Pese a su inicial rechazo, Durant acepta esa estrategia cuando le ofrecen su continuidad a cambio.

Macallan se ha fugado de la custodia americana y logra encontrarse con LeAnn. Esta no puede ayudar y lo único que puede hacer es ofrecerle su pistola, que al final será usada para matarle. La desaparición, supuesto suicidio, del espía hace que LeAnn reciba todo tipo de información que Macallan almacenaba. Davis, que anda tras esos documentos por los que es capaz de ofrecer todo a LeAnn a cambio, está en plena guerra con Mark Usher. Ambos tienen un pasado en común que les hace conocerse muy bien el uno al otro.

Walker va a testificar y todo parece pactado para que el ex-presidente se acoja a la quinta enmienda. Una conversación previa a la declaración con Frank hace que Walker admita todos los cargos e implique a Underwood como responsable. Por su parte, para terminar de fastidiar la presidencia de Frank, Tom Hammersmidt sigue investigando a Stamper, tira del teléfono que le dio el padre de Zoe. Se ve con Doug y lo único que consigue es la especialidad de la casa: una amenaza. Son varios, por tanto los frentes de los Underwood. El último de ellos es el hecho que Tom Yates sepa que Frank mató a Zoe Barnes y a Peter Russo, tras haberlo confesado Claire tras una pesadilla.

Knock, Knock

"Chapter 62" ha sido un buen episodio. Verosímil al menos, que no es poco. En él hemos podido ver como todos los enemigos que acechaban a los Underwood han dado un paso adelante dejando al matrimonio con poco margen de maniobra. Sólo les quedan como aliados el peligroso Doug Stamper, que apunto está de cometer un nuevo crimen tras acechar a la ex-pareja de Rachel, y la astuta Jane Davis. Casi al margen se encuentra Mark Usher, que no parece ser todo lo listo que parecía. Es la segunda vez que pierde el control de aquellos a los que debe aconsejar. En todo caso, peligrosos compañeros de viaje.

Jane Davis no deja de aportar cinismo en cada escena en la que aparece. Creo que hay que reconocer cierto mérito en esto porque hay que echarle ganas para convertirte en el personaje más hipócrita 'House of Cards'. En este caso, Davis se ha mostrado desaprensiva, pese a sus buenas maneras, cuando ha explicado cómo ella afrontaría ese posible ataque a Homs. No es muy difícil pensar que conversaciones muy similares se darán en nuestra convulsa realidad. Sólo hacen falta dos personas con mucho poder e influencia que compartan un mismo sub-lenguaje.

En todo caso, y siempre en el territorio de la ficción, se agradece la presencia de este tipo de personajes que dicen una cosa mientras hacen justo la contraria, como si no pudieran tener control de su propia maldad. Puede que esto sea lo mejor de 'House of Cards' y es lo que hace que sus personajes sean tan redondos. Hace que todo termine siendo imprevisible, fuera control, peligroso.