RECTIFICA POR JUNQUERAS

Toni Soler, presentador de TV3, pide perdón a los jueces del Tribunal Supremo a los que les deseó la muerte

Al enterarse de que Junqueras permanecería en prisión, Soler deseó que un tráiler atropellara a los miembros del Tribunal Supremo.

Por Covadonga Ballestero El 6 de Enero 2018 | 13:40

La decisión del Tribunal Supremo en cuanto al futuro de Oriol Junqueras, líder del partido ERC y exvicepresident del Govern, no fue del agrado de Toni Soler, conductor del programa de sátira político en TV3, 'Polònia' y del formato de actualidad 'Està Passant'. "¿Querer que un tráiler atropelle sucesivamente a todos los miembros del Supremo es delito de odio?", escribía en Twitter el pasado 5 de enero después de conocer la noticia que fue portada de todos los medios de comunicación a lo largo del día.

Toni Soler

Oriol Junqueras permanecerá en prisión preventiva, tras una votación unánime de todos los jueces, lo que provocó el descontento de Soler, quien horas después escribió de nuevo para disculparse, después de que las redes reaccionaran, recriminándole su agresividad, incluyendo a algunos independentistas que no entendían que un rostro tan mediático como él pudiese hablar así, provocando que la atención se desviase hacia sus palabras. El comunicador ha pedido "mil disculpas" y ha asegurado que no desea que nadie sea atropellado.

Las disculpas a Junqueras

"Perdón a Junqueras por ayudar al enemigo a desviar el foco", ha dicho desde su cuenta, después de que rectificara sus palabras. Toni Soler ha demostrado el apoyo al político independentista tras reflexionar durante un tiempo sobre la proyección que podría provocar sus palabras en su causa. Parece claro que se ha dado cuenta que lejos de apoyar a la causa, estaba provocando todo lo contrario, por ello ha decidido cambiar de actitud, al menos ante los medios de comunicación y redes sociales.

Una respuesta que también fue comentada

En la conversación también participó Andreu van den Eynde, el abogado de Junqueras, quien respondió a la pregunta de Soler en una aparente seriedad: "Pregúntaselo a un periodista que yo solo soy un abogado penalista y me pierdo", creando, entre ambos, lo que muchos tildaron de un ambiente tenso de provocación.