GOURMET EDITION

Ana Obregón y Rappel gana 'Ven a cenar conmigo: Gourmet Edition' en una surrealista cena con strippers

Los dos participantes acordaron donar el premio en una noche marcada por las confesiones sexuales de los invitados.

Por Jose María Martínez El 14 de Marzo 2018 | 10:40

La pasada noche del martes 13 llegó a su fin la primera edición de 'Ven a cenar conmigo: Gourmet Edition' en la que Lucía Etxebarria, Rappel, Víctor Janeiro y Ana Obregón competían para ver quien es el mejor anfitrión en su casa y poder llevarse los 3.000 euros de premio que el programa ofrece. En esta última entrega, los famosos acudieron a la casa de la actriz para degustar la cena que había preparado para ellos y con la que, empatada con Rappel, la hizo ganadora del concurso con un total de 28 puntos. Tanto la actriz y bióloga como el futurólogo decidieron donar el premio.

Los participantes de 'Ven a cenar conmigo: Gourmet Edition' en casa de Ana Obregón

A pesar de todo, Ana ya informó a sus comensales de que la cocina no era su fuerte, por eso se sacó de la manga una visita, aparentemente fortuita, de su hermana para que a ayudase con el menú. Y, aunque la comida no es lo que mejores críticas recibió, el ambiente creado y la hospitalidad de la protagonista de 'Ana y los siete' hicieron que los invitados se sintieran mas a gusto que en ninguna otra casa. Y eso lo consiguió gracias al tour que les hizo enseñándoles miles curiosos objetos como las notas de cuando estudió biología por ejemplo, dejando claro que no se trata de ningún bulo.

Tan distendido fue el ambiente que Lucía Echevarría se abrió como nunca lo había hecho cuando cuando tocó hablar de sexo, algo a lo que se negó de forma rotunda en anteriores entregas: "El sitio más raro donde lo he hecho ha sido en un ascensor. Mogollón de veces. Calles, naturaleza abierta todo lo que quieras...", contaba la escritora. Además se atrevió a explicar un romántico capítulo de su vida en un ascensor transparente en Israel. Pero, de todas las batallitas, sin duda una de las más rocambolescas fue la que contó Rappel: "Una amiga me trajo a una tienda de muebles y lo hicimos en el escaparate de una calle muy concurrida con los coches pasando. ¿Quién iba a mirar a un escaparate?", contaba un divertido Rappel.

Los extraños amigos de Obregón

Una vez terminada la cena, los invitados de Anita pasaron al salón para ponerse cómodos en el sofá. La bióloga avisó de que vendrían unos amigos suyos que hacía mucho tiempo que no veía. Una vez se habían saludado comenzó la música y, para sorpresa de los invitados, resultaron ser strippers contratados por la anfitriona para animar a sus invitados. Rappel disfrutó mucho con el baile de ella mientras que Víctor y Lucía intentaban, sin éxito, mantenerse al margen. Ana Obregón, por su parte, no podía parar de reír. Sin duda, un final de fiesta perfecto después de cuatro semanas de surrealistas y divertidas cenas.