DISCO IBIZA LOCOMÍA

Crítica de 'Locomía': Un culebrón con mucho baile de cuando España parecía moderna, pero España no era moderna

Movistar+ estrena la serie documental de 3 capítulos que narra las tres etapas clave de Locomía.

Movistar+

Por Sergio Navarro El 22 de Junio 2022 | 10:55

Todo el mundo ha escuchado hablar del grupo Locomía o incluso a tarareado aquello de "Disco Ibiza Locomía". Sabemos quiénes eran y su historia no es ningún secreto, pero hay miles de detalles que no se conocían y que ahora los espectadores vamos a poder ser testigos. El 22 de junio, Movistar+ estrena la serie documental de tres capítulos con los que nos vamos a quedar con la boca abierta.

Bajo el acertado lema "El mayor culebrón jamás bailado", recorremos la historia del grupo en tres etapas clave: su origen, su formación como grupo musical convirtiéndose en un fenómeno mundial y el declive con una nueva generación mal gestionada. Todo esto, contado con zapatos de punta, hombreras, baile, música y, por supuesto, abanicos.

La banda Locomía con José Luis Gil en el centro

Los formatos que repasan la trayectoria de un artista o un grupo siempre han funcionado y, viendo este, no hay duda de que Locomía necesitaba el suyo. No era la primera vez que se preparaba un programa repasando la trayectoria de este grupo, pero no se había llegado hasta ahora a las condiciones idóneas: que participaran todas las partes implicadas. ¡Y menos mal!

Dos protagonistas enfrentados

Pongámonos en antecedentes para saber quién es quién, al menos entre las piezas clave: Xavier Font fue el fundador del famoso cuarteto que arrasaba en Ibiza con su peculiar baile de abanicos que sedujo a todo el planeta. Era un chaval ambicioso, creído, egocéntrico, ligón y superado por la fama, algo que le impulsó a creerse un Dios. El resto de componentes fueron variando conforme pasaban el tiempo, pero ellos ni pinchaban ni cortaban (ni veían un duro mientras observaban cómo Font acumulaba oro entre sus dedos).

Por otro lado está José Luis Gil, productor y manager que descubre la formación de Locomía y ve que estos chicos tienen un gran potencial para convertirse en una boy band. Él es por tanto quien crea el grupo musical. Y es aquí donde empieza el culebrón donde la lucha de egos y las traiciones eran las grandes protagonistas. La relación entre ambos no era buena en absoluta. ¿Quién era el bueno y quién era el malo? Es importante escuchar los testimonios de ambos para que cada uno saque su conclusión.

Xavier Font, en 'Locomía'

Las dos caras de la moneda

Locomía se lo dio todo a los chavales que formaron parte del grupo durante alguna de sus etapas. Lujo, fama, reconocimiento, admiración, sexo, fiestas, amistades VIP... Pero esta serie documental no se queda solo ahí, sino que también (sobre todo) narra la otra cara de la moneda que demuestra que no es oro todo lo que reluce, pues las estafas, los robos, las drogas e incluso la cárcel también tienen su hueco en esta historia.

Un país que tenía ganas de ser diferente

En los 80 parecía que las cosas estaban cambiando. Gobernaban los socialistas, la movida madrileña estaba en pleno auge, Almodóvar se estaba haciendo un nombre con su cine rompedor, se acababa de elegir Barcelona para celebrar los Juegos Olímpicos 1992, mismo año en el que tendría lugar la Expo de Sevilla... España se estaba situando en el mapa y se le reconocía como un lugar libre, moderno y democrático. Y ahí surgió Locomía.

Pero aunque nos creíamos muy modernos en esa época (o teníamos muchas ganas de serlo), no lo éramos en absoluto. Como dice Valeria Vegas en el documental, "tenemos la perspectiva de que España era modera en los 80, y España lo que tenía era cuatro modernas que la hacían moderna". Existía la expresión "Pierdes más aceite que la furgoneta de Locomía", algo que no tenía sentido que se escuchara en un país tan progre como quería ser.

Gil prohibió a la banda contar que eran gays, pues todos los integrantes que han pasado por Locomía lo eran pero no lo podían mostrar con libertad. Todos lo aceptaron en su momento y a día de hoy Gil sigue manteniendo que tenía que ser así viendo el revuelo de fans (chicas en su mayoría) que acudían a sus conciertos y firmas, e incluso aeropuertos, hoteles... Lo bueno es que era un secreto a voces y aunque nunca se verbalizó, hubo mucho público gay que se vio reflejado y el grupo les ayudó a entenderse y verse representados.

Es para todos, para quienes vivieron el fenómeno y quienes no

Naturalmente, todos aquellos que vivieron la época de Locomía disfrutarán este documental que les trasladará al pasado, recordarán muchos temas y descubrirán otros tantos. Pero no solo para este tipo de público va destinada esta serie documental, pues también es para los que no hayan ni oído hablar del grupo en su vida, porque de verdad que atrapa como un culebrón en el que vas descubriendo a sus personajes, sus intenciones, sus objetivos y hasta dónde son capaces de llegar por conseguirlos.