Crítica de 'Snowfall': La nueva vuelta de tuerca al mundo de las drogas

La industria americana ha descubierto el talento español. En los últimos años, hemos visto como el país de referencia mundial en ficción televisiva bebía de nuestro producto patrio. 'Los misterios de Laura' y 'Pulseras rojas' saltaron el charco con su propio remake estadounidense. Ahora, nuestros actores son el nuevo reclamo internacional en producciones que cada vez tienen más en cuenta el mercado hispano. Miguel Ángel Silvestre ('Sense8'), Javier Cámara ('Narcos'), Paz Vega ('The OA'), Natalia Tena ('Juego de Tronos'), Carlos Bardem ('The Son') e Ivana Baquero ('Las crónicas de Shannara') son algunos ejemplos de talentos nacionales que ya han trabajado con AMC, Netflix, o HBO, entre otros canales o plataformas. El último en hacerlo ha sido el madrileño Sergio Peris-Mencheta, que debuta en FX con 'Snowfall'.

Este drama con ciertos alivios cómicos, creado por John Singleton, Eric Amadio y David Dave, y producido por FX Productions, Show Money Productions, Groundswell Productions y Underground Films, se ambienta en Los Angeles de 1983, en pleno ascenso de la droga del crack y la cocaína. La ficción está inspirada en la historia de "Freeway" Ricky Ross, el gran capo de la cocaína en Los Angeles que llegó a mover toneladas de droga durante los años ochenta. Tras una complicada y longeva gestación, con cambio de cadena y varias versiones rodadas del episodio piloto, han dado a luz un producto cuidado, ambicioso y con posibilidades.

El primer capítulo de 'Snowfall' nos presenta tres historias completamente independientes con un único nexo en común: las drogas. Franklin Saint (Damson Idris) es un joven afroamericano, un emprendedor callejero que busca algo mejor en su vida; Teddy McDonald (Carter Hudson) es un agente de la CIA que intenta escapar de un complicado pasado y que inicia una operación no oficial para financiar a los contras de Nicaragua; Lucía Villanueva (Emily Rios) es la calculadora hija de un jefe del crimen mexicano; y Gustavo Zapata (Peris-Mencheta) es un luchador chicano inmerso en una guerra de poder con una familia de criminales.

'Snowfall' destaca por su impecable factura visual y una fantástica estética. Tanto la ambientación como la colorida fotografía y la banda sonora te sumergen inmediatamente en la ciudad de Los Angeles de los años ochenta. Con un tempo no demasiado frenético, la ficción se toma su tiempo para presentar cada una de las historias, mostrando una serie de piezas de un puzzle que todavía no sabemos cómo van a terminar encajando. De hecho, esboza demasiadas historias que no terminamos de entender.

Sobredosis temática

A pesar de ser una producción atractiva, bien narrada, con una historia con potencial y un reparto más que solvente, podría penalizarle su temática. En los últimos años, han proliferado las ficciones vinculadas al mundo de las drogas y el narcotráfico. Desde 'Breaking Bad', 'The Wire' o 'Narcos' en la industria americana, hasta 'El Príncipe' y, próximamente, 'Fariña' o 'Vivir sin permiso' en la televisión nacional, así como "Sicario" en cine. La pequeña pantalla se ha convertido en una adicta a este género y esta sobredosis temática podría pasarle factura a 'Snowfall'. Aunque, tal y como ocurre en este tipo de ficciones, lo interesante no es el qué sino el cómo. El atractivo es ver la construcción y evolución de sus personajes. Eso sí, su piloto deja con ganas de más, con ganas de disfrutar con nuestra siguiente dosis. La serie se estrena el 6 de julio de 2017 en la plataforma de HBO España.