LO DE ÉVOLE

Dani Rovira se sincera sobre el tsunami de "8 apellidos vascos": "Ahora sonrío, pero antes me causaba rechazo"

El actor ha sido uno de los invitados de 'Lo de Évole', donde también ha hablado sobre su cáncer.

laSexta

Por Sergio Navarro El 6 de Marzo 2023 | 10:36

El exfutbolista Juan Carlos Unzué fue el gran protagonista de la entrega del domingo 5 de marzo en 'Lo de Évole' para hablar de la firmeza de su lucha contra la ELA (esclerosis lateral amiotrófica), que le diagnosticaron en 2019, y cómo disfrutar del presente. Pero para este encuentro, no ha estado solo junto a Jordi Évole, pues también le ha acompañado su mujer; el exportero Andoni Zubizarreta, la periodista deportiva Olga Viza o el actor y humorista Dani Rovira, que en la película "100 metros" interpretó a un enfermo de esclerosis múltiple.

Este último recordó también cómo afrontó su tratamiento al ser diagnosticado su cáncer en 2020, dos días después del estado de alarma: "Cuando enfermé fue una puñetera cura de humildad brutal. Llevamos toda la vida creyendo que las balas te silban a tu alrededor y que a ti nunca te dan, pero te dan", comenta el actor, que en ningún momento llegó a pensar que pudiera morir: "El linfoma de Hodgkin tenía muy buen ponógstico. Para el oncólogo era música para sus oídos".

El tsunami de "Ocho apellidos vascos"

Dani Rovira y Clara Lago, en "Ocho apellidos vascos"

Hablando de que hay que disfrutar del presente, Évole preguntó a Rovira sobre el fenómeno de "Ocho apellidos vascos" y de cómo se digiere algo así. "Eso es como si de repente te vas a Zarautz, que es donde pernoctamos en el rodaje, y te apuntas a un curso de surf de iniciación", arrancaba el actor con la comparación para seguir explicando: "De repente te metes y lo primero que te viene es un tsunami. Eso es lo que me pasó a mí. Y yo no sabía ni atarme la tabla al tobillo".

Y es que aunque él ya era un rostro conocido como humorista, todo esto llegó de repente y fue un boom que no se esperaba. "Yo hasta hace poco tosía y seguía tirando algas por la boca. Ahora bien. No lo supe disfrutar; no lo supe gestionar. Ahora me viene alguien y me habla de "Ocho apellidos vascos" y sonrío, pero antes me causaba hasta rechazo", comenta. Lo bueno es que el tiempo ha pasado y, tal y como comenta Rovira, "ahora es cuando estoy empezando a disfrutar de que ha bajado la espuma del champán y ahora es champán".