VELADA ÚNICA

El fetiche sexual de Bibiana Fernández con las esposas deja mudo al Dioni: "Esto es una provocación"

La cena en casa del Dioni en 'Ven a cenar conmigo: Gourmet Edition' ha dado pie a dejar volar el amor del anfitrión por Bibiana Fernández.

Por Redacción El 26 de Marzo 2020 | 11:56

En 'Ven a cenar conmigo: Gourmet Edition', El Dioni no quiso dejar pasar la oportunidad de dar una gran cena en su noche como anfitrión. Para ello agasajó a sus invitados con torreznos de aperitivo y servilletas en forma de billetes de 500 euros. De entre todos esperaba con ganas la llegada de Bibiana Fernández, alguien que le gusta especialmente por su "porte" y su "personalidad". Nada más entraba por la puerta la recibía con cumplidos: "Pero si pareces Cenicienta, cariño".

Bibiana Fernández y El Dioni en 'Ven a cenar conmigo: Gourmet Edition'

El Dioni confesaba que se le hacía muy raro "soñar" con la posibilidad de que Bibiana fuese a estar en su casa, para después dar su titular: "Ella ha iluminado mi casa con su presencia", decía a cámara. Entre las servilletas, y algún adorno de estilo personal del anfitrión como una caja fuerte en miniatura o unas esposas, Víctor Sandoval alucinaba: "Se debe de creer que es de una película de Ocean's 11, pero no lo es".

"Yo te voy a preguntar una cosa. ¿Las esposas son para decorar o porque a ti te gusta un poco que te amarren?", le decía seriamente Bibiana a Dioni refiriéndose a los adornos. "Una mujer que se precie tiene de todo", insinuaba la colaboradora para confesar que ella también tiene unas. "Puede entrar, en un momento dado, que te venden los ojos y que te aten, todo ese tipo de cosas", comentaba Bibiana a cámara tranquilamente, mientras que, en paralelo, El Dioni opinaba que esto "es una provocación".

Las anécdotas de Bibiana

De entre todas las vivencias que guarda Bibiana Fernández a sus espaldas, ha querido deleitar a los espectadores con una anécdota que guarda con las esposas: "Una vez un guardia en el aeropuerto me dijo que llevaba unas esposas en la maleta. Claro, yo lo sabía, y le dije: 'sí, sí, lo sé'. El pobre ingenuo me preguntó que para qué las quería y yo le contesté: '¿Quiere usted que le de detalles?'", relataba.