Serie relacionada
Tras asistir a la finale -de una duración total de 86 minutos-, me veo obligado a comentar dos apuntes rápidos antes de comenzar la recap de este último capítulo de la segunda temporada de 'True Detective': a su favor cuenta con numerosas opciones de convertirse con el paso del tiempo en serie de culto, pero sin duda este "Omega Station" no ha estado a la altura de las circunstancias.
Los últimos "Church in Ruins" y especialmente "Black Maps and Motel Rooms" habían elevado la calidad de un producto que comenzó bajo la permanente y amenazante sombra de una predecesora brillante en todo los sentidos (originalidad, narración, interpretaciones...), pero la despedida de la 2ª season ha resultado ser demasiado fría; por momentos hemos regresado a esa extraña sensación -entre desconcertante y ambigua-, que impregnaba la historia en su comienzo, una historia ante todo triste y trágica basada en una metaficción como es la ciudad de Vinci, inventada por Pizzolatto para recrear un mundo decadente, sin esperanzas, donde todo está podrido y donde los héroes mueren o huyen ante la imposibilidad de hacer frente a un sistema demasiado corrupto y demasiado poderoso.Pasemos ya a analizar que ha dado de si "Omega Station", el capítulo con el que se ha despedido 'True Detective' en este 2015.
3 partes de 30 minutos:
Primera parte. Arreglar cuentas con el pasado
Pizzolatto nos ha ofrecido un fragmentado último capítulo con tres partes claramente diferenciadas. La primera de ellas es la que hace referencia a los personajes de Erica (Laura anteriormente) y Leny (cuyo nombre era Leonard), aquellos niños que sufrieron la pérdida de sus padres en el asalto perpetrado por Burris, Caspere, Holloway y compañía más de veinte años atrás, y que provocó el robo de los diamantes y que esos dos hermanos quedaran huérfanos. Por tanto ha llegado el tiempo de su venganza. En un avance extrañamente rápido de la acción Ray y Ani visitan la casa de Leny y descubren gracias a Erica que él va a finalizar su plan iniciado con la tortura / asesinato de Caspere, intentado deshacerse del grupo corrupto que integra parte de la policía de Vinci.
Lo que resulta más chocante de estos minutos es que el famoso disco duro -que poseen los hermanos-, ya no guarda ningún archivo ya que ha sufrido un auto-borrado debido a su sistema de seguridad. Ray se adelanta a la jugada de Leny, pero a lo largo de la tensa conversación con Holloway (que ha sobrevivido a su encuentro con Paul en el 2x07), se descubre que Erica era una hija ilegítima de Caspere y que éste mantenía con él una relación de amantes. Además su asesinato cerraba cualquier opción de confesión por parte de ese personaje, así que la acción de Caspere y compañía se dirigió en los dos sentidos: económico y a la vez criminal.
En ese preciso momento la situación explota: Ray junto a la ayuda de Ani (que están en un proceso de enamoramiento si se permite esa palabra en un ambiente como el de Vinci), consiguen huir y Leny y Holloway mueren a causa de la intervención de agentes de la autoridad ajenos a toda esa trama.
Esta primera parte se cierra con el viaje en bus de Erica hacia Seattle con el fin de emprender una nueva vida, un trayecto iniciático para dar inicio a una fase llena de esperanza y oportunidades a modo de "tierra prometida".
Segunda parte. Un asalto al rancho a modo de western
Una parte que se planteaba a priori con una mayor carga de dramatismo se resuelve en escasamente 4 minutos, que es lo que dura el asalto del rancho en el que se encuentran McCandless y Agronov. Ray y Frank, formando un dúo bastante bien avenido, asesinan a todo el mundo y consuman su venganza, así que lo más interesante en esta segunda parte es todo el previo y lo que sucede a posteriori. ¿Qué vemos en los preparativos previos a esa orgía de disparos y muertes?, pues en primer lugar a un Frank muy comprometido con Jordan, su pareja con la que mantiene una relación peculiar (en esta serie no existe nada convencional), y con la que acuerda verse dentro de dos semanas en Venezuela una vez haya finalizado su hoja de ruta. Además los tentáculos del bando corrupto siguen adelante sin dejar ningún resquicio a una posible rebelión, y entre otros el alcalde Austin Chessani es descubierto por Semyon al más puro estilo de William Holden en 'Sunset Boulevard' (El crepúsculo de los dioses, Billy Wilder; 1950), flotando en la piscina de su mansión.
Una vez que el rancho se convierte en una morgue improvisada, Ray y Frank se dividen el dinero del botín y se despiden con un apretón de manos que formaliza esa amistad tan duradera en el tiempo y a la vez tan complicada. Pero claro, el pasado siempre vuelve, y aquí no iba a haber una excepción...
Tercera parte. El desolador final
A pesar de todo el mensaje anterior, lo que incluye esta tercera parte de 'True Detective' es la esperanza de seguir, de que la vida continua a pesar de todos los avatares que uno pueda sufrir. Ese es el mensaje que Pizzolatto pretende emitir: aunque todo esté destruido, aunque la sociedad del siglo XXI no resulte ser el mejor reflejo de la condición humana, la capacidad de mirar al futuro con ilusión debe mantenerse intacta.
Así que los dos personajes a priori han conseguido lo más difícil, pero aunque tanto a uno como al otro les esperen sus respectivos amores en tierras venezolanas, son atrapados por unas fuerzas de atracción que no pueden controlar. Frank es llevado al pleno desierto -en una escena que nos recuerda al 'Casino' de Scorsese (1995)-, donde el clan mexicano le pide cuentas de su acuerdo privado, pero no sobrevivirá a ese encuentro una vez es apuñalado y comienza a desangrarse a medida que intenta huir en un agonizante pasarela como si se tratase de un fantasma que pretende dejar atrás su complicada vida anterior. Y finalmente morirá.
Velcoro, a diferencia de Frank, busca el problema (Semyon ha caído en una emboscada entre dos automóviles que recuerda a una de las escenas del mejor 'El Padrino' de Coppola, 1972), así que de camino a su encuentro con Ani decide visitar a su hijo en el colegio para verle quizás por última vez. Esa parada técnica provoca que los hombres de Burris localicen su posición y le persigan hasta un zona boscosa donde le darán muerte. El personaje había cambiado, estaba enamorado de Ani y parecía haber encontrado su lugar en el mundo, pero el destino le guardaba el peor de los destinos.
Resulta llamativo que los dos grandes protagonistas masculinos de 'True Detective' mueran en entornos naturales: uno absolutamente árido; el otro con amplia vegetación en contrapunto a ese conglomerado de fábricas, industrias y carreteras que han poblado el paisaje de Vinci en esas escenas de transición tan características de todos y cada uno de los capítulos. La redención de Velcoro toma cuerpo al final del episodio ya que ha conseguido ayudar a Ani a superar sus traumas relacionados con el género masculino, y además vemos que han tenido un hijo en común derivado de su encuentro sexual en el 2x07 incluyendo así la figura de la descendencia y de que todo siempre tiene una continuación.
La despedida con epílogo aclaratorio
Una vez la trama oficial del 2x08 ha finalizado, podemos ver a modo de resumen que las cosas en Vinci no han cambiado para nada a pesar de los esfuerzos de Paul, Ani, Ray y Frank. La corrupción como modelo de progreso y ascenso social sigue en plena vigencia, y vemos como el hijo del ex-alcalde, Tony Chessani, es ahora el nuevo dirigente municipal, y el resto de integrantes de esa mafia (Geldof, Burris...), siguen poblando las esferas de poder de la nueva Vinci. La gran diferencia entre los protagonistas es que Frank y Ani son olvidados por diferentes motivos (una ha logrado huir y vivir y el otro era un hombre de negocios sin recorrido), mientras que Paul es descrito como un héroe y Ray es la víctima sobre la que hacen recaer todos los delitos, transformándolo en el chivo expiatorio de toda esa oscura trama.
Además la tragedia de Ray es mayor, porqué se comprueba oficialmente que en un porcentaje del 99'99 es el padre biológico de Chad, así que deja huérfanos a dos hijos sin saber que es el padre real de ninguno de los dos.
Por otra parte es la escena final Ani decide mantener contacto con un periodista del diario L. A. Times para ponerle al corriente de todo lo sucedido en Vinci gracias a todas las pruebas que conserva. Entonces las dos mujeres, Ani y Jordan, fuertes y con una gran seguridad en si mismas, se marchan para "un largo viaje" mezcladas por una gran avenida de una ciudad que se encuentra en plena celebración una vez que han dejado su pasado con Vinci, olvidándose de todo lo que pudieron vivir en esa tóxica sociedad.
A la espera de una tercera temporada...
Y así acaba Pizzolatto su segunda entrega de la miniserie 'True Detective'. Con un mayor número de errores que de aciertos, esta segunda entrega se merece un análisis pormenorizado y una justa valoración una vez emitidos todos los capítulos. Es cierto que no ha estado a la altura de la obra original, pero tampoco todo se trata de copiar o reformular; Pizzolatto ha arriesgado, y quien no arriesga no gana.
