CURIOSO ESTUDIO

Ver la tele después del trabajo te puede hacer sentir un "fracasado"

Así se desprende de un estudio publicado en Journal of Communication.

Por Alfonso Muñoz El 26 de Julio 2014 | 15:47

Es muy habitual llegar a casas después de un largo día de trabajo, sentarse en el sofá y ponerse a ver la televisión para desconectar de todo y desestresarte de tu jornada laboral. Sin embargo, esa rutina tan cotidiana puede no ser la mejor para el estado de ánimo.

Según un estudio publicado por Journal of Communication y que recoge el diario británico The Independant, la gente que regresa a casa tras un día de mucho estrés no sólo no encuentra placer o relajación en ver la televisión o jugar a videojuegos, sino que pueden experimentar sentimientos de culpa o incluso de fracaso personal.

Hombre se queda dormido viendo la televisión

El estudio se ha llevado a cabo por la Johannes Gutenberg University de Alemania y la VU University de Amsterdam, y en él han participado 471 personas en las que se ha estudiado su estado de ánimo tras el trabajo o el colegio el día anterior, y qué medio audiovisual habían utilizado.

El estudio demostraba que, aquellos que al llegar a casa especialmente cansados después de su jornada se ponían a ver la televisión, sentían que estaban aplazando otras tareas más importantes, con el sentimiento de culpa que eso les conllevaba. Este sentimiento les hacía encontrarse menos descansados y menos revitalizados, disminuyendo así el efecto positivo que les podía aportar ver la televisión un rato a modo de desconexión.

"Una fuente de estrés, más que de desconexión"

El coautor del reportaje, Dr Leonard Reinecke, de la Johannes Gutenberg University Mainz, declaraba: "Estamos empezando a entender mejor que el mal uso de los dispositivos audiovisuales pueden tener efectos positivos para el bienestar de las personas [...] Nuestro estudio es un primer paso importante hacia un conocimiento más profundo de este tema. Demuestra que, en la vida real, la relación entre la televisión y el bienestar es complicado, y que su uso puede estar en conflicto con otras tareas o actividades diarias menos placenteras pero más beneficiosas"

"En tiempos de smartphones e internet en el móvil, la disponibilidad constante de contenidos audiovisuales y comunicación, a menudo acaban convirtiéndose en una causa de estrés más que en una fuente de recuperación y desconexión".