FELIZ CON SUS HIJAS

Kiko Hernández ('Sálvame') presenta a Abril y Jimena, sus dos hijas, en la portada de una revista

El colaborador presenta a sus hijas junto a dos de sus compañeros del programa: Mila Ximénez y Kiko Matamoros.

Por Jose María Martínez El 19 de Julio 2017 | 12:08

Seis meses después de convertirse en el padre de dos niñas tenidas mediante gestación subrogada y, sabiendo con qué hermetismo guarda su vida privada, Kiko Hernández nos ha sorprendido a todos realizado la portada de la revista Diez Minutos. El colaborador ha elegido esta revista para presentarnos a Abril y Jimena, sus dos hijas, junto a sus compañeros de programa Mila Ximénez y Kiko Matamoros. En la entrevista, además, cuenta cómo es el día a día con sus dos hijas, así como a qué cosas le ha costado más adaptarse con este gran cambio en su vida.

Hay que recordar que se generó bastante preocupación por la vida de una de las niñas ya que, según contó el propio Kiko, nacieron con poco más de seis meses, haciendo que los médicos se temieran lo peor por una de ellas. Sin embargo, la fortaleza de las niñas hizo que salieran adelante siendo ahora dos retoños sanos con los que Hernández disfruta de su vida como padre, declarando que "son unas niñas muy buenas, nunca han tenido una fiebre, ni un cólico...".

Además, a pesar de que le cuesta conciliar el sueño desde que tiene a sus dos hijas, en la entrevista Kiko ya advierte que está preparándose para traer más hijos al mundo: "Quiero ir a por el niño y no es broma. Si Dios me da salud y dinero, lo voy a llevar a cabo". Una decisión que, sin duda, sería costosa tanto por el gasto económico que supone como por la gran atención que hay que dedicarle a dos mellizas, aunque Hernández desvela cómo consigue cuidarlas, trabajar y dedicar tiempo a otras cosas: "Dos cuidadoras se turnan para cubrir las 24 horas del día conmigo. Al principio quería hacerlo todo solo, pero era imposible".

La alegría de su vida

Kiko anunció en una entrevista en octubre de 2016 que debería abandonar el programa en febrero para irse a Chicago a esperar el nacimiento de sus dos hijas, ya que la madre gestante es norteamericana. Pero todo se precipitó cuando las niñas nacieron prematuramente, acelerando su salida del programa. Una vez en Estados Unidos, el colaborador tuvo que hacer frente a un fuerte gasto económico con el que no contaba. Las niñas tuvieron que estar en el hospital más tiempo del previsto, pero, finalmente, todo acabó de la mejor manera posible.