Gustavo González renueva look y actitud en 'Cámbiame': "Ha sido un error ser pasivo y complaciente"

El cuadrado amoroso entre María Lapiedra, Gustavo González y sus respectivas parejas tiene en ascuas a los espectadores de diversos programas de Telecinco desde finales del pasado año. Los protagonistas de la historia de amor se han paseado por el plató de 'Sálvame' y 'Sábado deluxe' en los últimos meses y han tenido que hacer frente a todos los rumores, verdades y mentiras que se han dicho de ellos desde entonces.

La pareja ha querido dar carpetazo a los rumores y afianzar su relación cambiando, tanto de imagen como de actitud. Gustavo se enfrentaba a los estilistas de 'Cámbiame' el lunes 26 de febrero para empezar con ese nuevo estilo de vida, tanto por fuera como por dentro. María Lapiedra, que una semana antes también se había sometido a las propuestas de los colaboradores del programa de cambios, acompañaba a su pareja durante su gran día, dejando claro que siguen juntos y cada vez son más fuertes.

"Vengo un poco por curiosidad. Poco hay que cambiar en mí más que la imagen negativa que se ha proyectado", comentaba Gustavo durante el taller que se celebra horas antes de cada programa, donde hablaba de la relación que mantiene con la actriz y colaboradora de televisión, con la que aseguraba que, aunque ambos atraviesan un momento complicado sentimentalmente, no cierra la puerta un nuevo matrimonio.

Se acabó el ser complaciente con todos

Tras el carrusel de amantes que se paseaba el pasado día 24 en 'Sábado Deluxe', Gustavo aseguraba que no todas habían dicho la verdad y que tomaría medidas legales. "No me siento orgulloso pero más bien he estado con pocas mujeres en mi vida", aseguraba el colaborador antes de convencerse del cambio al que iba a someterse: "Hoy voy a cambiar mi actitud, he sido pasivo y complaciente y creo que ha sido un error porque he alimentado un poco lo que está pasando, aunque no digo que la culpa sea mía... Yo no me siento culpable de lo que está pasando".

Tras un resumen de su paso por el taller de Cristina Rodríguez y Moncho Moreno, en el que no solo hablaba de su físico y de su relación con María, recordaba a su hermano, del que guarda solo bonitos recuerdos y al que siempre le ha dedicado las mejores palabras. El cambio se acercaba y Carlota Corredera quería conocer la opinión de María, quien no dudaba en asegurar que no cambiaría nada de su actual pareja, pues se había enamorado de la persona que era por dentro y de cómo se sentía cuando estaba junto a él.

Gonzalo no tardaba en atravesar la pasarela, con un aspecto mucho más juvenil, un pelo más oscuro y unas gafas que llamaban la atención de todos, incluida María, que no parecía muy convencida con el nuevo accesorio. Tanto jueces como el resto de estilistas compartían la opinión de que el nuevo look de Gustavo le había hecho perder, al menos, diez años y su pareja parecía encantada, no solo con el cambio sino con la actitud que se había propuesto tener desde ese momento.