Las claves de 'Mujer (Kadin)', la emotiva historia de una madre convertida en heroína

A finales de mayo, Nova reafirmó su apuesta por las telenovelas turcas con la adquisición de siete nuevas ficciones para ir sumando a su parrilla a lo largo de la temporada 2019-2020. Una de ellas fue 'Mujer (Kadin)', adaptación de un drama japonés escrito por Yuji Sakamoto, creador de la versión original de la también telenovela turca de Nova 'Madre'.

'Mujer (Kadin)' cuenta la historia de Bahar, una mujer que se ve obligada a luchar para sacar adelante a sus dos hijos tras la muerte de su marido, Sarp (Caner Cindoruk), un hombre del que estaba profundamente enamorada. Una tragedia que Bahar tratará de mitigar a ojos de sus hijos, mientras se esfuerza por hacerles felices en medio de una precaria situación que acabará acercándola a su madre, una mujer a la que guarda un profundo rencor después de que esta los abandonara a ella y a su padre cuando era una niña. A raíz del éxito que ha ido cosechando en Turquía y en otros países, y ante su futuro estreno en Nova, en FormulaTV recogemos algunos de los ingredientes que podrían convertirla en una fuerte apuesta para la cadena.

1 La relación entre Bahar y Sarp

Uno de los ejes de la historia de Bahar y sus dos hijos, Nisan y Doruk, gira en torno a la relación que ella había mantenido con Sarp. Aun cuatro años después de su muerte, el alpinista está muy presente no solo en la vida de la joven viuda, también en la de sus hijos. A pesar de su ausencia, la protagonista consigue mitigar un tanto el impacto que su fallecimiento pudiera tener sobre sus pequeños gracias a sus ingeniosas y dulces ideas. Una mecánica a la que también recurre para ayudarles a afrontar con mayor optimismo la precaria situación a la que se tiene que enfrentar a raíz de perder su casa y el bajo sueldo que recibe.

Además, en relación con lo que va sucediendo en la trama principal, son habituales los flashbacks en los que Bahar recuerda tiernos y destacados momentos con su marido. Unas escenas en las que no solo los espectadores pueden disfrutar de la buena química que logran crear los actores Özge Özpirinçci y Caner Cindoruk.

2 Özge Özpirinçci como Bahar

Özge Özpirinçci es la encargada de dar vida a Bahar. La actriz turca consigue bordar la interpretación de un personaje muy humano, consciente de su dura realidad pero, al mismo tiempo, capaz de enfrentarla con fuerza, no solo por sus hijos, también por ella misma. Bahar tiene momentos de flaqueza, pero está dispuesta a seguir adelante sin apenas ayuda y sin dejar de dar todo lo que pueda a sus dos hijos, a los que queda más que evidente que adora. Además, el personaje cuenta con un firme sentido de lucha contra las injusticias, lo que en un entorno hostil puede llevarla a meterse en más de un problema.

Lejos de esa faceta cariñosa, comprensiva, luchadora y preocupada de Bahar, la protagonista es una mujer que también tiene un cierto "lado oscuro", a raíz de la complicada relación con su madre, Hatice (Bennu Yildirimlar). Una mujer que la abandonó cuando ella tenía apenas ocho años, al igual que a su padre, con el fin de casarse con otro hombre, con quien tuvo una niña. Tras veinte años sin contacto alguno dado el rencor que Bahar siente hacia ella, la precaria situación económica de la protagonista la arrastra a reencontrarse con Hatice, no para solicitar su ayuda, sino para que afirme que no le presta ningún apoyo económico ante las autoridades y que así pueda recibir ayuda económica. Una inesperada visita que, de forma irremediable, hará que Bahar y la familia de Hatice se aproximen paso a paso o acaben alejándose de forma irremediable.

3 Nisan y Doruk, los pilares de Bahar

Dentro de la trama de 'Madre (Kadin)', la producción cuenta con la presencia de Nisan y Doruk, hijos de Bahar, interpretados por los jóvenes actores Kubra Suzgun y Ali Semi Sefil, quienes fueron galardonados como Mejores actores infantiles en los Premios de la televisión turca Altin Kelebek de 2018. Dos niños que, tras la muerte de Sarp, se han convertido en los pilares esenciales de la vida de la protagonista y por los que Bahar se desvive con el fin de darles todo lo que merecen, hasta el punto de aceptar varios trabajos para conseguir dinero suficiente para tener una vida decente, mientras trata de lidiar con la angustia de no disponer de algún conocido que pueda encargarse de sus pequeños mientras tanto.

A pesar de las dificultades, Nisan y Doruk demuestran ser dos niños tan cariñosos y amables como su madre, además de comprensivos a pesar de su corta edad. Ambos son conscientes de que la situación no es sencilla para su madre y tratan de hacerla lo más llevadera posible la mayoría del tiempo, llegando incluso a rechazar "caprichos" al darse cuenta de que son inalcanzables. No obstante, como niños que son, también realizan alguna que otra trastada o broma, lo que los convierte en dos personajes tan tiernos como humanos, que logran ganarse el corazón no solo del espectador, sino de todos aquellos personajes que, poco a poco, van apareciendo en sus vidas y la de Bahar.

4 Las relaciones amorosas, en un segundo plano

Una de las cosas que podrían diferenciar especialmente a 'Mujer (Kadin)' de gran parte de otras telenovelas turcas es el hecho de que el romanticismo no es el eje de la historia. Bahar no busca a un nuevo amor. De hecho, la protagonista se muestra totalmente en contra de iniciar una nueva relación, ni siquiera cuando una de sus amigas se lo plantea como una vía para dar una vida mejor a sus dos hijos. Bahar se siente lo suficientemente fuerte y decidida para enfrentar las dificultades, para valerse por sí misma.

Por supuesto, Bahar acaba viéndose sumida en alguna que otra relación, pero eso no cambia el hecho de que sus hijos siguen siendo su prioridad. Es su historia la que prevalece por encima de todo, no tanto aquella que comparta con algunos personajes que van apareciendo a lo largo de los episodios.

5 Una dosis de incógnitas, tragedia y ternura

A lo largo de los episodios, Bahar tiene que hacer frente a numerosos conflictos y dificultades que se sitúan en su camino para lograr una vida mejor para ella y para sus hijos, comenzando por el hecho de que son expulsados de su casa sin previo aviso. Desamparados y con un presupuesto reducido, Bahar, Nisan y Doruk terminan en un modesto piso situado en un barrio pobre y de aspecto algo conflictivo. Un entorno ligeramente hostil en el que sus problemas prometen multiplicarse al interactuar con algunas de las personas que los rodean. Conflictos que otorgan al argumento cierto toque trágico que enganchará al espectador, a la espera de conocer cómo irán finalmente las cosas para la protagonista y su familia.Sin embargo, Bahar y sus hijos encuentran momentos de paz y mucha ternura que suponen una pausa en medio de sus desgracias.

Además, 'Madre (Kadin)' también cuenta con un toque enigmático que logra generar curiosidad en el espectador. Con el contacto recuperado, en cierto modo, con la familia de Hatice, Bahar conoce por fin a su hermanastra, Sirin (Seray Kaya), una joven dibujante algo solitaria. Sin embargo, lejos de tener una vida normal, la hija de Hatice esconde un secreto que podría cambiarlo todo: conocía a Sarp y, de hecho, estuvo presente en el momento de su muerte. Un hecho que Bahar desconoce y que despierta preguntas acerca de qué es lo que unía a Sarp con su cuñada, cómo fue realmente la muerte del alpinista o si había motivos para que acudiera a la casa de Hatice antes de morir, más allá de su deseo de que Bahar y su madre se reconciliaran.

6 Problemas de mucha actualidad

Una de las señas inconfundibles de muchas de las telenovelas turcas es el hecho de que colocan el foco sobre problemas de actualidad que trascienden incluso más allá de las fronteras de Turquía. 'Madre (Kadin)' entra dentro de este saco, al recoger la historia de Bahar: la protagonista no solo ha de hacer frente a las dificultades de cuidar a dos niños pequeños sin ayuda alguna, sino que también se topa con asuntos tan serios y, por desgracia, reales en muchos lugares del mundo, como que el salario que recibe en su puesto de trabajo no sea suficiente para cubrir las necesidades de su familia.

A todo ello se suma también la situación en la que Bahar se encuentra como mujer, más subestimada o amenazada que si estuviera "acompañada" por su marido o si fuera un hombre. Estando en un barrio humilde, la protagonista tiene que hacer frente a desagradables e intimidantes situaciones en las que no siempre sale airosa. Además, la ficción también pone el foco en la violencia de género, especialmente a través del personaje de Ceyda, vecina de Bahar.

Distante al comienzo, Ceyda es una mujer que ha de ejercer como prostituta y es sometida brutalmente por su proxeneta, quien incluso amenaza a la propia Bahar para que vigile a "su propiedad". En este aspecto, la protagonista se muestra bastante reticente a mantenerse al margen como si no ocurriera nada, por lo que resulta muy interesante ver cómo se va desarrollando la relación entre ambas a medida que avanzan los episodios. Algunos ejemplos que demuestran que, más allá de la historia de Bahar, 'Mujer (Kadin)' ofrece un toque de realidad que la convierte en una buena apuesta para Nova de cara a los fans de las telenovelas turcas.