ANÁLISIS

El final de 'Veneno' huye del morbo para darle a Cristina el homenaje que merecía

Los Javis y su equipo de guion dan con la tecla ideal para despedirse de La Veneno de la manera más coherente: entre luces y sombras.

Por Alejandro Rodera El 25 de Octubre 2020 | 12:20

Un charco de sangre y muchas incógnitas. A día de hoy la auténtica causa de la muerte de Cristina Ortiz, La Veneno, sigue siendo todo un misterio que, como cualquier interrogante mediático, ha desatado todo tipo de teorías conspirativas. Ante ese agujero negro de información, los creadores de 'Veneno', Javier Ambrossi y Javier Calvo, afrontaban el desafío de cerrar la serie de Atresplayer Premium siendo fieles a la verdad y a la protagonista de su biopic sin caer en morbosidades vacías. Y así lo han hecho.

Cristina y Valeria se reúnen por última vez

El episodio final de 'Veneno' arranca con un homenaje a las pioneras de la reivindicación trans en España, para después cortar sin miramientos a la tragedia que articula el capítulo: el repentino fallecimiento de La Veneno. Del momento en el que se encontró su moribundo cuerpo tan solo muestra la brecha que presentaba en la cabeza, de la que emanaba el torrente de sangre que había teñido el suelo de su descuidado piso, y el vaivén desorientado del novio con quien compartía su vida en aquel momento.

Después de ese impactante instante, en el que la serie no busca recrearse, el destino de Cristina está sentenciado. Si el supuesto accidente que la dejó en coma tuvo lugar el 5 de noviembre de 2016, su vida se desvaneció cuatro días después. En ese breve plazo, 'Veneno' vuelve a apoyarse en los hombros de Valeria para indagar en lo sucedido. Al no obtener respuestas, el personaje de Lola Rodríguez no se frustra por no encontrar la solución al enigma, sino por la cruzada de la familia de Cristina en contra de la voluntad que ella misma había expresado en sus memorias.

La familia de Cristina observa su agonizante cuerpo

Despedida en tres actos

Aunque 'Veneno' no se regocije en teorías sin demostrar, sí que personifica esa obsesión en la figura de una de las hermanas de Cristina, que vincula la muerte con una "mano negra" procedente de las altas esferas. De esta manera, se atiende a la corriente de pensamiento que atribuye el fallecimiento al interés de acallar los idilios que La Veneno habría mantenido en el pasado con políticos, futbolistas y demás personalidades de renombre. Aun así, lo realmente importante del desenlace de 'Veneno' no es la causa de la muerte, sino lo que sucedió después, esos tres entierros que dan nombre al episodio.

El primero de esos entierros es el único que la madre de Cristina quería para ella: en Adra y como Joselito. Sin embargo, la intolerancia de la matriarca termina por abrir del todo las grietas entre sus hijos. En un movimiento magistral por parte de los guionistas de la serie, uno de los hermanos de Cristina, interpretado por Pepón Nieto, abre los ojos cuando se da cuenta de que su hijo homosexual podría vivir en un mundo mucho más abierto de mente si La Veneno no quedara sepultada bajo un nombre que no era el que ella había elegido. Y para reforzar esa idea, Marcos Sotkovszki, que había encarnado a Joselito en su adolescencia, da vida ahora al sobrino de Cristina, cerrando el círculo de la influencia de la protagonista de 'Veneno' como icono del colectivo LGBTQ.

La insistencia del hermano ante la petición de Valeria provoca que la cenizas de Cristina se dividan en dos. Por un lado, la mitad de sus restos quedan emplazados en la mesilla de noche de la madre, mientras que la mitad restante da pie a Javier Ambrossi y Javier Calvo para fantasear con el homenaje que Cristina habría merecido. Tras un onírico encuentro entre Valeria y La Veneno, la escritora comienza a relatar cómo habría sido el entierro ideal. Toda la familia acudía unida, el equipo de 'Esta noche cruzamos el Mississippi' y las compañeras del parque del Oeste hacían acto de presencia y, en el último momento, Paca la Piraña irrumpía en un taxi conducido por su amado José Coronado. Y, para cerrar esa emotiva fantasía, las cenizas lanzadas al aire abrazaban a todos sus seres queridos, unidos por el orgullo hacia la homenajeada.

El personaje de Pepón Nieto se despide de su hermana

Una lección eterna

Desgraciadamente, la realidad no dio pie a un éxtasis como el imaginado por Valeria. Justo después de atestiguar el idílico funeral, vemos al hermano de Cristina, totalmente solo, esparciendo las cenizas alrededor del árbol más grueso del parque del Oeste. Así, la ficción no solo muestra la despedida que su protagonista habría merecido en un mundo en el que todos fuéramos libres de vivir siendo nosotros mismos, sino que remueve el estómago al exhibir la vergonzosa despedida recibida por alguien a quien hoy en día podemos ver como un icono.

En definitiva, 'Veneno' ha terminado celebrando los momentos más bonitos de la vida de Cristina, sin olvidarse de aquellos no tan luminosos que acabaron por destrozarla. Por eso la estrella caída en desgracia muere justo en el momento en que su madre le besa en la frente, porque finalmente consigue el amor de quien tanto se lo había negado. Gracias a 'Veneno', aunque sea demasiado tarde para que Cristina lo vea, finalmente la igualdad vence al odio y el desprecio. Y Los Javis y su impresionante elenco lo han hecho priorizando el sentimiento y la emoción. No han retratado ni a una puta ni a una santa, sino a un ser humano que merecía respeto.