Sinceramente...

Roque inaugura su exposición de cuadros y, para su sorpresa, descubre a Alma entre los asistentes. Por si fuera poco, su padre aparece también por allí, y sospecha que Alma pudo haber posado ligera de ropa para su hijo. Adolfo, por su parte, va a verse en problemas: el artículo que escribió criticando los métodos educativos del Zurbarán va a tener serias consecuencias para él.

Yoli se siente cada vez más inclinada sentimentalmente hacia Julio. Quiere liarse con él, pero Quino se interpone en el camino. Paula mira cada día con mejores ojos a Gorka. Esa mirada benévola se va trasformando, poco a poco, en algo más. Irene sigue adelante con su plan de acudir a lugares de intercambio de parejas, y arrastra en esta iniciativa a Thomas, que no lo ve nada claro.

Cabano sigue con problemas para aceptar su situación de enfermo. Ruth trata de animarle todo lo que puede, aunque él no se lo pone nada fácil. Fer sabe que el padre de David se ve con Olimpia. Como David está muy presionado por su familia debido a su condición sexual, Fer no sabe si utilizar esta información para ayudar a su chico o no. La severa actitud en el trabajo de Martín despierta dudas en Blanca: ¿de verdad quiere casarse con un hombre tan recto y serio?