No se han dedicado comentarios agradables la una a la otra y su enemistad parecía irreconciliable. Al menos hasta este jueves. Gloria Camila y Paola Caruso están cada vez más cerca de una amistad, y el motivo podría ser un detalle que las une de manera incondicional: ambas concursantes son adoptadas.
La italiana habría mostrado cierto interés en compartir con su compañera la experiencia de ser adoptadas, sin embargo a Gloria Camila no le hace especial ilusión hablar sobre este asunto: "No me gusta tocar el tema de la adopción. No tenemos nada en común. Hemos venido a sobrevivir, así que tú a lo tuyo y yo a lo mío".
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Y es que la propia Gloria Camila ha explicado que ella se considera hija de sus padres adoptivos, y por eso prefiere no entrar a valorar su experiencia como hija adoptiva. Aun así, segundos más tarde la hija de Ortega Cano se ha mostrado más receptiva a una posible reconciliación con su compañera: "No sabía que ella era adoptada. Si se quiere desahogar, lo hablamos".
Por su parte, Paola ha explicado que su intención era simplemente "tender un puente" entre ella y Gloria Camila: "Quería conocer cómo se siente otra persona adoptada, porque yo he vivido una historia difícil... Aquí hay mucho tiempo y se puede hablar tranquilo". Finalmente, ambas concursantes podrán tener esa conversación pendiente, pues Paola ha conseguido librarse de la expulsión.
