Jimmy Kimmel no se mueve de su silla, pues el cómico y Disney han pactado una extensión de un año que mantiene 'Jimmy Kimmel Live!' en ABC hasta 2027. La ampliación llega después de que la cadena sacara el programa de la parrilla durante unos días de septiembre a raíz de las quejas de dos grandes grupos de afiliadas, Nexstar y Sinclair, por un monólogo en el que Kimmel habló del ultraconservador Charlie Kirk. El propio presentador confirmó el acuerdo con su ironía habitual en Instagram: "Estoy agradecido de anunciar otro año de no-talento".
El contexto de la renovación, avanzada por Bloomberg, ha sido todo menos plácido. Tras aquel monólogo, el presidente de la FCC, Brendan Carr, cercano a Donald Trump, llegó a amenazar con revisar licencias de estaciones afiliadas si no se "tomaban medidas" contra el presentador. Nexstar y Sinclair decidieron además sustituir 'Jimmy Kimmel Live!' en parte de sus mercados, generando un apagón parcial del late showw de ABC pese a la decisión de la cadena de regresar a la emisión.

-
'Traitors: El debate' Programa 2
-
Tu Cara Me Suena El Debate! Analizamos la gala 6
-
Nos colamos en la grabación de Cifras y Letras
-
Tu Cara Me Suena El Debate! Analizamos la gala 2
-
María Bernardeau y Biel Anton nos hablan de FoQ La nueva generación
-
Promo de La familia de la tele
-
La revuelta salta al prime time
-
Velvet: Yon González protagoniza el remake de Telemundo
ABC reactivó el programa el 23 de septiembre y la vuelta de Kimmel firmó 6,3 millones de espectadores, su mejor dato en una década, en plena ola de apoyos públicos al presentador y con un debate encendido sobre libertad de expresión. En el propio espacio, Kimmel también respondió a nuevas descalificaciones de Trump, que volvió a cargar contra él en público, mientras el cómico convertía la polémica en material de su opening y celebraba, a su manera, la continuidad del show.
¿El final de su contrato?
Con esta extensión de su contrato, que pasa de mayo de 2026 a mayo de 2027, el final de 'Jimmy Kimmel Live!' podría estar ya fijado. En el evento de Screentime organizado por Bloomberg, el presentador prefirió no hablar de su futuro profesional, pues ya adelantó que iba a ser el último de sus contratos, pero es consciente de que termina fluctuando en sus decisiones.

No obstante, hay una importante motivación a por qué podría estar cerca su final y es el coste. Según ha explicado, los programas de late show nacieron como una opción para lograr la presencia de celebrities a un bajo precio. Con el paso de los años, estos formatos han ido encareciéndose hasta el punto de acercarse a los 120 millones de dólares.