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El plató de 'En boca de todos' se convierte en el centro neurálgico del hastío político y vive un duro conflicto entre dos colaboradores. En plena tertulia sobre los supuestos ingresos no declarados de José Luis Ábalos, Antonio Naranjo y Sarah Santaolalla se enzarzaron en una fuerte discusión que terminó con la intervención de Nacho Abad para poner fin al enfrentamiento.
Todo comenzó cuando Santaolalla pidió "un poco de respeto" tras varias interrupciones de Naranjo y quiso dejar clara su independencia profesional: "Yo soy analista política, a mí no me paga ningún partido político, a diferencia de a ti así que un poco de respeto". El periodista de Telemadrid respondió tajante: "Tú eres una propagandista" y añadió: "¿A mí quién me paga?, a lo que ella replicó con contundencia: "A mí no me da un político un programa de televisión".
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Fue entonces cuando Antonio Naranjo cruzó una línea más personal y lanzó una insinuación que incendió el plató del espacio de Cuatro: "Entonces dirías que tu pareja, que presenta un programa en Televisión Española, es un propagandista", en referencia a Javier Ruiz, presentador de 'Mañaneros 360' en RTVE. La analista, visiblemente alterada, reaccionó de inmediato: "Pero, ¿qué estás diciendo, Naranjo?", mientras Nacho Abad pedía calma: "Esto no va de vidas personales ni del trabajo de nadie".
El enfrentamiento llega en un contexto especialmente delicado para los medios públicos. En los últimos días, tanto RTVE como Telemadrid, cadena en la que trabaja Naranjo, han estado en el centro de la polémica por las acusaciones de parcialidad y de "uso político" de la televisión pública. El caso más reciente fue el de la entrevista a Isabel Díaz Ayuso en Telemadrid durante la retransmisión del Día de la Hispanidad, que fue señalada en redes por su tono propagandístico y falsamente improvisado.
Naranjo vuelve a encender el plató
El rifirrafe con Santaolalla no ha sido el único momento incómodo de Antonio Naranjo en el programa de Mediaset España. El periodista también protagonizó otro enfrentamiento con Fernando Carrera, candidato del PSOE en Badalona, cuando el político le reprochó su falta de neutralidad: "Por eso os gusta Telemadrid", dijo Carrera, a lo que Naranjo respondió: "Me encanta Telemadrid porque no llevo a propagandistas como vosotros". Este clima de desconfianza hacia los medios públicos se coló de lleno en el plató de Cuatro, donde intercambios reflejaron esa división sobre la independencia informativa de ciertas cadenas.
