Los capitanes de cada equipo de LaLiga junto a AFE (Asociación de Futbolistas Españoles) han trazado un plan como protesta para evitar que el Villarreal-Barcelona de diciembre se juegue en Miami. Esta decisión fue muy controvertida desde el principio, generando descontento entre la agrupación de futbolistas, que no entienden la necesidad de desplazar un partido de la liga española a otro país o continente. Sin embargo, también había gente de acuerdo, como el presidente del Villareal que afirmaba que este hecho les otorgaría una gran recompensa económica y facilitaría el desplazamiento de los socios del club para que pudieran asistir al encuentro.
De cara a esta nueva jornada liguera, que arrancaba tras el parón de selecciones, los futbolistas han decidido mostrar su descontento con LaLiga con una acción simbólica: permanecer totalmente quietos durante los primeros segundos de cada partido, mostrando así su enfado dirigido al organismo dirigido por Javier Tebas por su falta de transparencia. Esta protesta tuvo lugar por primera vez en el partido del Real Oviedo y el RCD Espanyol que se disputó el viernes 17 de octubre y seguirá en pie en el resto de enfrentamientos, aunque se mantendrá al margen a los futbolistas del FC Barcelona y el Villarreal pese a que "comparten la posición de fondo y los puntos críticos", como reza el comunicado de AFE.
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No obstante, las protestas que se vivieron por primera vez en el partido del viernes fueron silenciadas y censuradas por LaLiga, que, en la realización que proporciona a Movistar Plus+, no emitió las imágenes de los futbolistas quietos. En su lugar, la retransmisión mostró un plano del estadio desde fuera y enfocó a ambos entrenadores para después enfocar al campo en el segundo 25, cuando el partido ya había iniciado verdaderamente su juego. De este modo, se vuelven a ocultar imágenes, como ya sucedió recientemente en San Mamés con el homenaje a Palestina.
Durante esa digresión visual mientras los jugadores estaban inmóviles sobre el campo, el equipo de narración de Movistar Plus+ tampoco hizo mención alguna a lo que estaba sucediendo, al igual que sucedió con los narradores y comentaristas de DAZN, que ofrecía el encuentro en abierto. La plataforma de Telefónica emitirá también el Sevilla-Mallorca, el Villarreal-Betis, el Celta-Real Sociedad y el Getafe-Real Madrid, por lo que habrá que esperar para comprobar si aplican la misma línea editorial. Por su parte, DAZN ofrecerá el FC Barcelona-Girona, el Atlético de Madrid-Osasuna, el Elche-Athletic y el Alavés Valencia, durante los cuales podría mostrar lo que sucede sobre el campo.
¿Qué pasará con las entradas?
Esta falta de acuerdos entre AFE y el organismo dirigido por Javier Tebas ha provocado una incertidumbre aún mayor respecto al traslado del Villarreal-Barcelona a Miami. Como apunta El País, el objetivo de la patronal es poner a la venta las entradas en la semana del 20 de octubre, aunque la falta de comunicación productiva con AFE siembre dudas acerca del encuentro transatlántico, que en principio se disputará el 20 de diciembre.
