Paco Porras reaparece en televisión y confiesa que se ha prostituido: "Llegaron a mearme en la boca"

Las alarmas saltaron cuando Miguel Ernesto, amigo de Paco Porras, llamó desesperado a 'Sálvame' para comunicar que el vidente se había marchado de su casa sin decir nada. El espacio afirmó que Porras se podría encontrar viviendo en la calle y por eso hicieron un llamamiento para encontrarle. Finalmente, el 30 de enero el colaborador de 'Crónicas marcianas' reapareció en 'Sábado deluxe' para desmentir algunas de las informaciones que se habían vertido sobre su situación y las extrañas experiencia que había vivido recientemente.

Cuando Jorge Javier Vázquez le preguntó que cómo se encontraba: "Vivo, pero bien", aseguró el invitado. Explicó que debido a la crisis sanitaria se quedó "sin un céntimo" y como tiene que pagar sus medicinas para sus problemas del corazón, el vidente aceptó un trabajo que finalmente no fue lo que tenía pensado. Se marchó una semana a un chalet en Altea donde se le pagaba una cuantiosa cifra por pasar consultas esotéricas, pero resultó ser un prostíbulo: "Ellos querían citas especiales y con más intimidad. Querían hacer más cosas conmigo", confesó Paco Porras ante la atenta mirada de los tertulianos.

"He sido retenido como una especie de arresto domiciliario, lo que pasa es que se ha pasado de la raya. Esto está denunciado ya, la policía está allí", afirmó el invitado, pero por desgracia, antes de que llegasen las autoridades, tuvo que prostituirse y dejar que le "humillaran". Un policía o una pareja del Norte de Europa eran algunas de las personas que tuvieron sexo con él entre otros clientes, según comentó. Porras narró además algunas de las prácticas que le hicieron como, por ejemplo, atarle un cordel en el pene o quemarle con cera en diferentes partes del cuerpo: "Llegaron a mearme en la boca y tuve dejar que me hicieran una doble penetración anal".

"Lo filmaron todo"

La historia que explicó Paco Porras llegó a un punto en el que colaboradores de 'Sábado deluxe' no pudieron evitar reírse, a pesar de que el invitado afirmó haber sufrido daños psicológicos y físico al pasar por esta terrible experiencia que fue grabada en todo momento: "Lo filmaron todo. Estaba todo lleno de cámaras, parecía 'Gran Hermano'". Por suerte, el vidente consiguió escapar de allí gracias a la ayuda de una mujer y por supuesto, no se llevó ni un céntimo de lo acordado: "La madamme se quedó con todo".