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Tras deslumbrar en su primer ensayo al apostar por el humo y las formas circulares en su puesta en escena, Blanca Paloma ha regresado este 6 de mayo al Liverpool Arena, el escenario donde prepara su segundo ensayo de cara a la gran final del Festival de Eurovisión 2023. A lo largo de la mañana, los representantes del denominado Big 5 y del país vencedor del año pasado, Ucrania, han pisado el estadio para preparar su actuación del 13 de mayo.
Sin cambios en el vestuario que llevó en su primera vez en el escenario de Liverpool, la artista también repite la puesta en escena, según relata el blog del Festival. Así, se mantienen los aspectos escultóricos que simulan el fuego en la parte superior del atuendo. En la realización, se han añadido ajustes sutiles. "El cambio más sustancial ha sido un plano hacia el final de la actuación que nos parecía muy sucio y que no funcionaba en pantalla", ha explicado José Pablo Polo a RTVE.
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En la puesta en escena, las bailarinas y la intérprete del "Eaea" llenan el escenario iluminadas por tonos rojizos y blancos y con el negro presente. También ha mantenido las estructuras semicirculares, dentro de las cuales se desarrolla la actuación. Por último, el humo que añadieron en el primer ensayo prosigue en este segundo, creando así una "atmósfera extra" y añadiendo "una calidad diferente a la luz", según relataban desde el blog citado.
La voz, extraordinaria
La delegación española del festival publicaba momentos previos a este segundo ensayo distintos vídeos en los que Blanca Paloma perfeccionaba las pruebas de sonido. Ahí se ha podido escuchar su voz, impecable. "Realmente tiene una voz extraordinaria", relataba el blog. Por último, ha destacado una pequeña variación melódica, pues sustituye la nota sostenida del final con la de la versión de estudio, con su quejido como seña de identidad.
