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La segunda temporada de 'The Last of Us' ha llegado a su fin con un explosivo séptimo episodio. Bajo el título de 'Convergencia', la adaptación de la saga de videojuegos de Naughty Dog ha lanzado a Ellie y Jesse al campo de batalla de Seattle y, tras separarles, ha embarcado a la protagonista en dirección al acuario, donde pretendía encontrar a Abby. Sin embargo, en vez de toparse con su némesis, se ha cruzado con dos de sus aliados, Owen y Mel, que han muerto trágicamente en medio de esta espiral de violencia constante.
Y para darle un cariz aún más grave a la situación, el crimen de Ellie no solo era doble, sino triple, ya que hay que recordar que Mel estaba embarazada. "Hasta este punto, Ellie probablemente podía justificar todo lo que ha hecho. Toda la gente a la que ha matado era mala. Pero no puedes justificar matar a un niño", explica Neil Druckmann, cocreador de la serie y responsable creativo de los juegos, en el making of del episodio. "En el juego, esa secuencia también es increíblemente brutal y violenta, y es algo deliberado. Queremos mostrar lo bajo que ha caído Ellie", añade la coguionista Halley Gross.

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Tras tocar fondo, la figura de Ellie como heroína queda en duda, al igual que su supervivencia. Al regresar al cine abandonado junto a Jesse y Tommy, la paz es efímera, puesto que Jesse muere tras recibir un disparo en la cabeza. En ese momento, Ellie se desmorona por completo y encuentra ante sí a la otra cara de la moneda de esta historia: Abby. La joven interpretada por Kaitlyn Dever regresa tras su salvaje irrupción al comienzo de la temporada y, una vez superado su particular viaje, se enfrenta a la persona que ha exterminado a sus amigos.
"Ellie se observa a sí misma. Ellie ve a Abby y ve la rabia y el dolor de alguien a quien le ha arrebatado a quien más amaba. Es un momento en el que se cierra el círculo, pero ya es demasiado tarde y Ellie debe asumir las consecuencias de lo que ha hecho", reflexiona Gross. El cara a cara, marcado en primera instancia por el silencio, culmina con un disparo y un corte a negro.
¿Ha muerto Ellie? ¿Qué ha pasado con Dina? El episodio no responde a ninguna de esas preguntas y, de hecho, las obvia por completo al interrumpir el negro sepulcral para incluir otra secuencia que despierta a Abby de un profundo sueño. Después de recorrer un pasillo, sale a la grada de un campo de fútbol americano reconvertido en campamento del Frente de Liberación de Washington y aparece un revelador rótulo: "Seattle. Día uno".

La otra versión
Se trata de un salto al pasado que nos lleva temporalmente al momento del arranque de la aventura de Ellie en Seattle, pero desde el punto de vista de Abby. "Ponemos en marcha la travesía de Abby sobre lo que pasó en esos tres días y por qué ha hecho lo que ha hecho y cómo ha lidiado con que alguien la estuviera persiguiendo a ella y a sus amigos", apunta Druckmann.
Por tanto, la tercera temporada estará centrada en Abby, de la misma manera que, en cierto punto, el videojuego nos permitía pasar de controlar a Ellie a manejar a Abby para subvertir las expectativas creadas durante la primera mitad de la historia. "En Hollywood estamos acostumbrados a contar historias de buenos y malos. Lo que intentamos hacer en 'The Last of Us' es contar historias de personas. Y en este caso, toda la gente, independientemente de su bando, tiene razones para estar furioso con alguien en algún momento. Y esa rabia resulta en violencia, venganza, mentiras... Y la pregunta es: ¿dónde acaba todo? ¿Tiene fin? Y si es así, ¿cómo?", sentencia el showrunner Craig Mazin.
De este modo, la serie resignificará eventos que hemos visto en esta segunda entrega al mostrarlos a través del prisma de Abby y, por el camino, ahondará en diferentes realidades de Seattle y de personajes a los que ni siquiera hemos conocido todavía. "Esta historia va a ser muy importante a la hora de volver a ver a Joel y Ellie y todo lo que ha pasado hasta ahora", explica Druckmann en una entrevista concedida a The Hollywood Reporter. Por su parte, Mazin asegura que Joel podría regresar en algún flashback, aunque no será el único que podría reaparecer: "No hemos visto lo último de Kaitlyn Dever, así como de Bella Ramsey, Isabela Merced y de mucha gente que ya está muerta".