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Los nervios están a flor de piel en 'GH Revolution'. Con el regreso de Laura y Miriam convertidas ya en concursantes de pleno derecho, las chicas se están tomando muy en serio su implicación en la convivencia, empezando por la prueba semanal. Una vez más, el juego propuesto esta semana por el equipo del programa ha crispado los nervios de los concursantes tras poner en peligro el presupuesto semanal.
Casi una treintena de errores ha denunciado Laura, que se ha quejado frente a Miriam de la actitud de Yangyang y Pilar durante la prueba: "Han estado cantando y bailando". El comentario ha molestado seriamente a Miriam, que le ha pedido a su amiga que llame la atención a sus compañeras en lugar de quejarse.

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Por su parte, la sevillana le ha recordado que ella "no es madre de nadie", lo que ha hecho explotar a la gallega: "Tienes tanta personalidad que si no te pones a decirlo, te pones a hacer lo mismo. Se lo toman a coña y mi comida está dependiendo de esto". El enfado de la recién repescada tensó los nervios en el jardín, lugar donde tomaba el sol plácidamente Carlos. El cocinero aprovechó la disputa para intentar calmar los nervios de su compañera: "Igual has tenido un puto respiro para venir motivada", le reprochó haciendo alusión al tiempo en que la chica ha estado fuera del concurso.
La discusión fue a mayores, tanto que el cocinero mandó "a tomar por culo" a Miriam, mientras que está le contestó con un contundente "gilipollas". "Más vale que te acostumbres, me cago en la puta. Te crees la protagonista y la que tiene que montar el pollo", le recriminó Carlos.
Finalmente, Miriam zanjó la discusión con unas palabras que anunciaban la ruptura de la amistad entre ambos concursantes, mientras que el cocinero parecía estar de acuerdo con la decisión de la chica, ya que sus palabras sonaron a despedida: "Si no te gusta mi forma de ser, te jodes y punto, y te la comes. Si no me quieres oír, o te tapas los oídos o te largas".