En los últimos años se ha experimentado un crecimiento en el ritmo del cambio de los contenidos sin precedentes. Todo esto ha afectado a muchos sectores del audiovisual, pero especialmente de la distribución. Por ello mismo, el festival Iberseries & Plantino Industria ha dedicado una de sus ponencias a este tema para tratar de descubrir dónde estará el negocio en 2030.
"La necesidad de la gente para ver lo que ellos quieren, cuándo, cómo, de qué forma y con quién quieran ha cambiado lo que solía ser una muy lucrativa y tradicional estrategia de ventanas para productos de cine o televisión", expresaba Alexander Marín, VP Distribución de RCN International. "No hay nada lineal y la gente no sabe cuándo lo es. La curva de consumo se ha alterado completamente y ha llevado a destruir la curva de monetización".

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Pese a que las predicciones de este profesional no son muy positivas, David Atlan-Jackson, CCO de Vuelta Entertainment, ha matizado: "Mi grupo de trabajo todavía cree en el sistema de ventanas y en que es la única forma de hacer un activo y de que algo destaque. (...) Si no, solo desaparece en alguna especie de vacío que la gente no quiere ver o no verá en el futuro". Por su parte, Al De Azpiazu, SVP Distribution de Fremantle para Francia, Alemania, Italia, España, Portugal e Israel, opinaba: "El gran reto ahora es que, desde un punto de vista financiero, solíamos tener muchas opciones diferentes, pero ahora es cada vez más difícil respetar y mantener las diferentes ventanas de monetización".
Los tres ponentes han expresado cómo los programas de entretenimiento, conocidos como non-scripted, han experimentado un crecimiento brutal. "El consumo digital de 'Gran Hermano' o 'MasterChef' en una plataforma lineal que es en abierto es mucho mayor que las audiencias del lineal", analizaba Marín. En ese punto han tratado cómo plataformas como Netflix no necesitan linealidad en su emisión, pero sí se comportan como tal con sus contenidos.
"Funcionan cada vez más como una televisión normal, renovando series, aceptando el sistema de ventanas, entrando como primera televisión de pago para películas, entrando como segunda ventana de televisión de pago o como primera ventana de televisión de pago en determinados territorios. Eso ha cambiado por completo. Y eso ni siquiera ha sido en los últimos tres años", añadía Atlan-Jackson.

Por su parte, Alexander Marín apostaba a que "hay un elemento geopolítico" vital en este cambio que no está siendo regulado por los gobiernos, en referencia a toda la compra de empresas audiovisuales que están modificando el sector. Sin embargo, puntualizan en que el entramado estadounidense es muy diferente al europeo. "Estados Unidos está totalmente bloqueado en términos de producción por los costes porque es demasiado caro filmar ahí", señalaba el CCO de Vuelta. "Está controlado por la mayoría de las plataformas y YouTube y todas esas compañías increíblemente poderosas. En Europa las principales cadenas están controlando el juego más que las plataformas".
El contenido en el centro
En cuanto al contenido actual, David Atlan-Jackson comentaba que es necesario trabajar en todos los campos, ya que "las modas son muy rápidas": "Las cadenas y las plataformas cambian su línea editorial tan rápido que necesitas estar preparado. Y mezclan géneros, tipos de presupuestos...".

A este hilo, Marín completaba: "Una de las cosas que ha cambiado enormemente en los últimos cinco o diez años es que el poder de las estrellas ya no es lo que era porque muchos de estos tipos están haciendo películas que se estrenan directamente en plataformas. Y no hay alfombra roja ni hay ventanas". Además, también incidía en que "la demanda de contenido es menor que hace tres años y a todas las personas que crean contenido les está costando mucho colocarlo". "Por eso hay que encontrar más de un socio y eso no es fácil", coincidía Al De Azpiazu.
"La historia tiene que ser la fuente", aseguraba Marín, que ponía como ejemplo 'La casa de los famosos'. "Todo el truco de ese programa es la narración dentro de ese lugar: los pones en un lugar del que no pueden salir, no pueden hablar entre ellos y la historia se crea sola, les haces hacer cosas para que tengan que interactuar".